Luego de que el Senado aprobara el anticipo de los comicios para el 28 de junio, los funcionarios de Turismo se mostraron preocupados por el efecto negativo que esto podría tener en la actividad. Menos espacios publicitarios y falta de interés de la gente, aparecen como las consecuencias más temidas.

Tras nueve horas de debate, el Senado de la Nación convirtió en ley el proyecto oficialista para adelantar las elecciones. El Frente para la Victoria (FpV) consiguió que 42 legisladores levanten su mano por el sí, doblando casi los votos negativos, para que la próxima jornada electoral se de el 28 de junio y no el 25 de octubre como estaba previsto.
Cosas del Congreso. La última vez que el FpV había ido al recinto para convertir en ley un proyecto propio, el tiro le salió por la culata; algunos aliados se le escurrieron por entre los dedos y, finalmente, el famoso “mi voto no es positivo” del Vicepresidente Julio Cobos dio por tierra con la 125. Pero esta vez los números no le fueron tan hostiles como entonces. Mientras Miguel Ángel Pichetto -presidente del bloque de senadores del FpV- y su bancada se felicitaban mutuamente y algunas miradas de agradecimiento se desviaban para otros sectores, el oficialismo festejó.
Quienes, a priori, no tienen mucho para festejar son los destinos turísticos argentinos, ya que con esta medida, las elecciones se van a disputar tan sólo unas semanas antes del receso invernal. Es decir, las vacaciones de invierno, pulmón de reserva del turismo vernáculo y marcapasos imprescindible en tiempos de crisis como los que está atravesando el país y el mundo en estos momentos, se verán afectadas, sin más, por los comicios. Ya vapuleados por la actualidad económica y financiera, los argentinos, estarán pensando en quién votar y dejarán poco espacio en su cabeza para planificar las vacaciones. A la vez, y según lo que expusieron la mayoría de los dirigentes consultados por este medio, el espacio publicitario, tanto electrónico como impreso, se verá indiscutidamente reducido y direccionado hacia la propaganda política, dejando breve terreno para la promoción de destinos, una de las estrategias principales de las provincias para mostrar sus ofertas y atraerse las bondades económicas de los compatriotas turistas.

Turismo alicaído
Es cierto que la ley no ayuda al turismo. Por el contario, contribuiría, según algunos, al proceso de detrimento que se viene sintiendo en la actividad desde que estallara, en octubre pasado, la crisis financiera internacional, un proceso que cuenta con el ingrediente interno del conflicto entre el Gobierno y sectores que responden a los intereses de la industria agropecuaria.
Bartolomé Abdala, ministro de Turismo, Cultura y Deporte de San Luis, se enlista en esta perspectiva. “Creo que la medida afecta negativamente”, afirmó el funcionario puntano respecto del adelantamiento de las elecciones legislativas. “La predisposición de la gente va a estar mucho más concentrada en el tema eleccionario que en planificar sus vacaciones. A su vez, la ansiedad y sobre todo la preocupación que generan estas elecciones van a afectar indudablemente el ímpetu del turista”, agregó. Además, puso de relieve que “va a costar mucho más hacer campaña, no sólo por la falta de espacio sino también porque se van a incrementar los costos de la publicidad”. A la vez, el Ministro, sumó un condimento más. “Sin duda el turista extranjero es reticente a visitar países en épocas de elecciones y las vacaciones de invierno quedaron muy cerca de los comicios; eso te ahuyenta gente del exterior porque uno quiere ir de vacaciones a un lugar seguro, tranquilo, sin encontrarse con grandes sorpresas”.
Quien no acompañó este último parecer fue el presidente del Ente Tucumán Turismo, Bernardo Racedo Aragón. “No lo veo así. No creo que el turista extranjero deje de viajar por elecciones y menos con estas, que no son presidenciales”. Sin embargo, el funcionario reconoció que la medida afecta al mercado interno. “La crisis provocó esta acertada decisión del Gobierno nacional de adelantar las elecciones, pero creo que esto va a repercutir en la actividad porque la gente va a poner en stand by su decisión de viaje hasta visualizar que pasa en la Argentina. Es probable que, como ocurrió en la Costa Atlántica el año pasado cuando la fecha de alquiler de inmuebles se corrió de octubre a noviembre y diciembre, la decisión de viaje de la gente, que normalmente se toma entre mayo y junio, se postergue hasta después de las elecciones”. Esto, según el funcionario, afectaría, sobre todo, las posibilidades publicitarias de las provincias. “Las fuertes campañas de las políticas van a tapar las propuestas publicitarias turísticas, la sociedad va a hablar de las elecciones y no de vacaciones. De todo esto, puede resultar una baja o una postergación en las reservas”.
En la misma línea se situó Gustavo santos, presidente de la Agencia Córdoba Turismo: “Lo del espacio publicitario es un dato objetivo”, dijo refiriéndose a la posibilidad de que mermen las vacantes, y agregó: “No cabe duda de que hasta el 28 de junio -el mes más fuerte de promoción de invierno- va a estar el espacio comunicacional fuertemente influenciado por las elecciones, sobre todo en las condiciones actuales”.
Catalina Krapp, secretaria de Turismo de Catamarca, fue tajante: “En Buenos Aires no se va a poder hacer publicidad porque va a estar todo tapado por el tema de las elecciones, por eso nosotros no vamos a poner un peso allí; aunque sí nos vamos a promocionar en las provincias que nos circundan”.
Por su parte, Germán Pérez, secretario de turismo de Buenos Aires, relativizó la cuestión: “Es probable que afecte en algunos destinos, aunque en la Provincia no creo que influya demasiado”.
El titular de la subsecretaría de Turismo de Corrientes, Facundo Palma, puso de relieve otro de los peligros que corre el turismo en años electorales: la desatención y el redireccionamiento de los activos hacia terrenos más fértiles, como la campaña. “Estamos en un año electoral y por supuesto nos va afectar. La tensión de la clase política y dirigencial del nivel más elevado está apuntado a las elecciones. Nosotros estamos hablando de turismo cuando ellos están armando las listas, cuando se están definiendo las candidaturas, es como que estamos fuera de foco”, advirtió.

El turismo entre cortes y elecciones

En cuanto al adelantamiento de las elecciones, el subsecretario de Turismo de Santa Cruz y presidente del Ente Patagonia Argentina, Alexis Simunovic, afirmó: “No creo que nos afecte. Me parece que van por caminos separados y el argentino que tenía pensado tomarse vacaciones, se las va a tomar”. Sin embargo, advirtió: “Esperemos que no haya ningún estallido social, ni paros o ese tipo de cosas. El año pasado con el conflicto del campo nos vimos afectados. Esas sí son cosas a las que el turismo es sensible. Por suerte, esa especie de guerra política se va a dar antes y esperemos para julio estar pacificad