Tras participar del vuelo inaugural de Austral a Río Cuarto, un grupo de periodistas arribó al Sheraton Córdoba Hotel cerca de la medianoche. Los 15 pasajeros (invitados por AR, empresa que aloja a sus tripulaciones en dicho hotel) pidieron comer algo y la respuesta fue un No rotundo, tanto en la recepción como en el Bar, ¡que todavía estaba abierto!
Luego de intensas gestiones, y a punto de sentirse derrotados, los viajeros encontraron una voz de ayuda en el personal de cocina, que no sólo se apiadó de los famélicos viajeros, sino que además con muy buena predisposición salvó la situación, y el prestigio del hotel.
Para ser un país turístico aún hay muchas situaciones que debemos mejorar y esta es una de ellas.     

Todavía no empezó el verano y ya hay discusiones sobre los aumentos que tendrán los alquileres de casas y de carpas en los balnearios argentinos. El Emtur rechaza la propuesta del Colegio de Martilleros de incrementar los calores en un 20%. 
Por otro lado la Asociación Civil de Propietarios de Alojamientos Turísticos de Las Grutas decidió mantener los mismos precios que la temporada anterior. 
¿Y si todos apuntaran para el mismo lado? 

A pesar del fin del cepo cambiario y de que algunos diarios dejaron de titular sus tapas con el tema, aún sigue habiendo compra y venta de divisas en plena calle Florida.Los precios varían según el arbolito pero el trato es el mismo, una vez averiguado el valor que pagan por el verde billete y al aceptar la transacción, comprador y vendedor ingresan a un local de venta de remeras o camperas y al fondo, tras una puerta, se realiza el cambio.Muchos se preguntan ¿no será hora de que los arbolitos sean suplantados por jarrones de flores? 

-No viejo, así no! Se acabó el romanticismo, la emoción de no saber si el clima va a estar de nuestro lado, y el poder confraternizar por horas con quienes están en la dulce espera junto con uno y que era parte del encanto del viaje.
- Pero vos, ¿de qué hablás?
- Del nuevo vuelo entre Ushuaia y Punta Arenas que nos deja sin la incertidumbre del cruce en ferry del Estrecho de Magallanes que nos obliga la travesía terrestre entre nuestro país y la ciudad chilena. 
Habrá que acostumbrarse al cambio. ¿No?      

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