Además del cambio del isologotipo, también se creó un “Comité Interministerial para la estrategia Marca País Argentina”, presidido por el ministro de Turismo, Gustavo Santos.

Desde el viernes pasado, el isologotipo oficial de la Marca País de la Argentina fue modificado, y además se creó un “Comité Interministerial para la estrategia Marca País Argentina”. El cambio fue realizado por el Ministerio de Turismo, encabezado por Gustavo Santos, aspirando a la “regularización y estandarización de la imagen nacional en el mundo”.

La nueva imagen será regida a través de un “manual de marcas” que será aprobado por el Ministerio de Turismo. Por su parte, el isologotipo anterior quedó descartado desde la salida del decreto Decreto 191/2018 firmado por el Presidente Mauricio Macri en el Boletín Oficial. El cambio obedece a la mejora cualitativa de la gestión de la “Marca Argentina”, entendiendo conveniente unificar la coordinación de la “Estrategia Marca País Argentina” con las acciones desarrolladas en materia de promoción internacional de inversiones en turismo.

En dicho Decreto se informa que el Comité será presidido por el mismo ministro de Turismo, mientras que los demás cargos estarán conformados entre un representante de la cartera de Turismo, uno del Ministerio de Producción, uno del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, y el resto desde la Jefatura de Gabinete y la Secretaría General de la Presidencia. El objetivo de éste será trabajar en el “posicionamiento internacional, la promoción del turismo y las exportaciones, y el fomento de la inversión extranjera directa”, según se dio a conocer.

“Para la definición de la marca se realizó una investigación de mercado internacional y se hicieron entrevistas a personalidades de la política nacional, la cultura, el deporte, los negocios y otros representantes de la sociedad civil”, explicaron desde Presidencia ante el cambio.

La marca anterior había sido presentada por el entonces secretario de Turismo, Carlos Meyer, en mayo del 2006. El desarrollo había comenzado dos años antes, en 2004, en concordancia con la presidencia de Nestor Kirchner. En ese entonces, la imagen tenía como fin transmitir “dinamismo, cambio y transformación”, según había explicado Luis María Kreckler, por entonces subsecretario de Comercio Internacional. Además de haber contado con los colores de la bandera, en aquella marca también había una franja gris plata, que según Kreckler, brindada “elegancia, modernidad, innovación y tecnología”. Siete años después, en 2013, la marca sufrió una renovación y modernización, manteniendo la base pero estilizando las líneas, y sustituyendo el gris por el amarillo.