Los representantes de los operadores de transporte turísticos de Argentina confirmaron que este martes 6 de agosto se movilizarán para reclamar que se extienda por dos años la vigencia de las unidades de 2010 y 2011. Se estima que participarán entre 100 y 120 micros.  

Cabe recordar que en marzo de este año, los representantes de este segmento ya habían presentado un petitorio ante la Secretaría de Transporte de la Nación, pero hasta el momento no obtuvieron una respuesta. 

Reclamo por 1200 familias 

Hoy nos encontramos en una situación crítica que afecta a muchas pequeñas empresas, 1.200 pymes que dependen de la circulación de los micros. Lo cual representa 1200 familias sin ingresos”, informaron en un comunicado. 

En 2021 comenzó el reclamo de los representantes de los operadores de transporte turísticos de Argentina.

“Comienzan a vencerse los plazos acordados y al no recibir respuestas, confirmamos el llamado a movilización. No es solo una cuestión de prórrogas, es una cuestión de supervivencia para muchas familias que dependen de este trabajo”, aseguraron. 

Cabe destacar que un punto a tener en cuenta es que esta misma modalidad que solicitan ya se aplicó para los modelos correspondientes a 2008 y 2009 a través del DNU 351/2022 por dos años; y a los 2010 con el decreto 577/2023 por un año. 

Un conflicto que ya lleva varios años 

El reclamo de los representantes de los operadores de transporte turísticos había comenzado en  2021 cuando se logró que se extienda hasta 2010, dado que por normativa estas unidades tienen un tiempo límite hasta los 13 años.

En julio pasado, Ariel Porciel, uno de los que encabezó el petitorio para que les acepten una reunión y discutir el tema en el área de Transporte de Nación, habló con Mensajero para dar más detalles de este conflicto. 

“Para nosotros, este año se caen las unidades que son modelo 2009, 2010 y 2011, lo cual representa 1200 pymes que quedan sin trabajar, más 2400 choferes que no van a poder trabajar”, explicó.

Asimismo, puntualizó en que ninguna de las empresas quieren hacer una movilización porque saben que complican al trabajador, pero consideran que es la única manera de poder lograr que les den al menos una respuesta.