Se canceló el Transpolar. Después de muchas idas y vueltas entre empleados y empleadores, el histórico vuelo quedará desafectado de las rutas de Aerolíneas Argentinas a partir de abril de 2014.
Las cuestiones que llevan a tomar esta decisión son muchas, entre otras la flota unificada, los gastos operativos, los pasajeros transportados; todas tan importantes como que el vuelo AR 1180/1181, era un mérito importante en la historia de la aviación comercial argentina.
Si bien no todos están de acuerdo con la medida, la discusión de la unificación de flota es una realidad que no puede dejarse de lado. Si bien los A340 podían renovarse y realizar un vuelo circular Buenos Aires/Sidney/Aukland/Buenos Aires, los gastos operativos de flota y tripulaciones en escala, nunca compensarían el desfasaje de una tarifa cuyo yield no alcanza a cubrir los gastos de combustible, aún volando con ocupación plena.
Pero lo más importante, sin duda, es que un vuelo subvencionado por el Estado argentino tenía un factor de ocupación reducido en casi un 20% para que el vuelo continuara siendo Non Stop, y fundamentalmente con pasajeros extranjeros,  ya que australianos y brasileros son los principales usuarios del servicio, utilizando la escala argentina como conexión, y no como país de destino.
Como si esto no fuera suficiente, para el pasajero autóctono, Australia se ubica en el puesto 50 de sus preferencias de viajes, y como quedó dicho, no aporta al turismo receptivo.
Siempre le pedimos a nuestra aerolínea de bandera eficiencia, y esta es una manera más de incrementar el rendimiento, aunque algunos sigan pensando lo contrario.

por Manuel Sierra
msierra@mensajeroweb.com.ar