El centro comercial de Concepción del Uruguay consideró perjudicial al denominado “proyecto turístico integral”, un eufemismo de la entrega del patrimonio público al empresario Miguel Marizza, que entre otras cosas implicaba ceder la terminal de ómnibus y el mercado para instalar en éste máquinas tragamonedas.
Dentro de los enroques de edificios previstos en este proyecto turístico, sufrió sin comerla ni beberla el museo “Yuchán” que debió abandonar por orden perentoria de la municipalidad el lugar que ocupaba en la ex sede de la comuna.
Ahora el centro comercial se sumó a los partidos políticos, que todos menos el justicialismo en el poder han rechazado el proyecto, y a un dictamen judicial que prohibió desalojar a los artesanos del mercado, donde se instalarían las máquinas tragamonedas que ya llegaron a Concepción del Uruguay.
El presidente del Centro Comercial insistió en la necesidad de revisar el proyecto turístico integral que viene de la gestión municipal anterior, de Marcelo Bisogni.
Reconoció que la terminal quedó “muy en el centro” de la ciudad y que es necesario buscarle otra ubicación y que es necesario que vengan nuevos “pero siempre que sea sin perjuicio del patrimonio público”.

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