Playas para el verano y termas todo el año
Se podría decir que Entre Ríos es conocida desde siempre por sus famosos complejos termales, distribuidos a lo largo del territorio provincial. Ofrecen distintas alternativas de servicios y cada uno tiene su encanto.
Desde el placer de disfrutar alguno de los tantos spa y salones de tratamientos de belleza, hasta divertirse en los parques acuáticos o en piletas de olas.
Pero no sólo de termas vive el turismo entrerriano. Suaves arenales, extensas playas, calor y ritmo festivo son sinónimos de esta provincia.
Concordia, una de las ciudades más pintorescas y atractivas, tiene diversas propuestas. Sobre la costanera: Los Sauces, aguas arriba Nebel y La Tortuga Alegre; sobre el lago de Salto Grande: Punta Viracho, Las Palmeras y de Los Médicos. Por las noches, carnaval y mística de gran ciudad.
Gualeguaychú, con su amplio Ñandubaysal sobre el río Uruguay, Solar del Este y las playas urbanas de la costanera, se enlaza con el Carnaval del País, la más poderosa expresión de brillo y espectáculo. Concepción del Uruguay muestra a Banco Pelay y a Itapé como sus playas más atractivas. Es sede de la tradicional Fiesta Nacional de la Playa de Río y tiene también su magnífico carnaval.
Colón es sinónimo de turismo y se viste de villa veraniega con múltiples atractivos. Tiene kilómetros de playa y cada noche brinda una propuesta diferente, destacándose la Fiesta del Turismo y la semana de la Fiesta Nacional de la Artesanía.
Federación, por tener el privilegio de recostarse sobre el lago de Salto Grande, tiene playas diferentes y aun en verano no deja de ofrecer su condición de ciudad termal, con la posibilidad de disfrutar de las aguas cálidas durante la noche. Una mención especial merece la Fiesta del Lago, con actividades deportivas y música en vivo.
Gualeguay también combina arenas sobre el río que le da nombre con las mágicas noches de la Fiesta Provincial de las Comparsas, denominación que recibe su colorido carnaval. Victoria se destaca por su «Momo participativo», un carnaval donde todo el mundo puede disfrazarse y vivir junto a murgas y mascaritas... Al otro día, por supuesto, playas, visitas a la Abadía de los Monjes Benedictinos, pesca y descanso.
Paraná, con el balneario municipal y el Thompson con incomparable vista. La Paz, en tanto, recibirá a los amantes de la pesca, pero con sus familias, para mostrarles sus bellezas, sus playas y por las noches hacerse una escapadita a las sedes de carnavales en ciudades vecinas. Chajarí propone su balneario camping, confortable, moderno y con todo el equipamiento de vanguardia que se suma a las múltiples actividades de la ciudad norteña.
El listado no culmina allí. La dicha de que las ciudades se ubiquen sobre cauces fluviales hace que cada centro turístico tenga sus propias playas: Villa Urquiza, Rosario del Tala, San José, Diamante, Villaguay, Valle María y Santa Ana, entre muchas otras. Extensos y suaves arenales cubren las costas de los ríos Uruguay y Paraná en una provincia que sabe disfrutar del carnaval dura