La estatización de Aerolíneas Argentinas y Austral por parte del Gobierno Nacional trae aparejada e implica una profundización en las relaciones bilaterales con Venezuela. A los buenos tratos, elogios y a la cooperación mutua que hay entre los países hoy dirigidos por Cristina Fernández de Kirchner y Hugo Chávez, respectivamente, se agrega ahora un “acuerdo de códigos compartidos”, que iba a ser firmado el viernes, al cierre de esta edición, en Caracas, por los dos mandatarios. Dicho acuerdo involucra a las dos principales compañías aéreas de la Argentina y a Conviasa, la línea venezolana de bandera.

Larga en marzo
En declaraciones a una agencia de noticias, el diputado del bloque Encuentro Popular y Social (EPS), ex director de Aerolíneas y Austral en representación del Estado y ex gremialista de la Asociación del Personal Aeronáutico (APA), Ariel Basteiro, indicó que se trata de “un acuerdo de cooperación aerocomercial”. El legislador explicó, a su vez, que si bien el convenio se rubrica en enero empezaría a aplicarse recién a partir de marzo. Este proceso permitiría a la compañía venezolana ahorrar dinero en la utilización en tierra de las estructuras de Aerolíneas, y a lo mismo sucedería con la empresa argentina en Caracas.

Ida y vuelta
Otro dato importante, confirmado por el propio Basteiro, es que la integración aerocomercial entre los dos países hace posible realizar el tramo entre las dos capitales por cualquiera de las dos aerolíneas con el mismo pasaje. Esto implica, por ejemplo, que un pasajero que sale de Buenos Aires con un ticket de AR puede hacer escala en Caracas y seguir su rumbo al destino predeterminado en un avión de Conviasa. Lo mismo sucederá en caso de que un turista se dirija a Buenos Aires en un vuelo de la compañía venezolana: podrá abordar una aeronave de la línea de bandera argentina para continuar hacia el destino final. “Las empresas luego se rinden los tramos correspondientes”, explicó Basteiro.
El ex sindicalista consideró además que “este tipo de acuerdos es muy normal en la actividad aerocomercial”, y manifestó que eso se debe a que “cada vez que se hacen provocan generan mayor nivel de ventas”.

Puntos en común

Al igual que sucedió con Aerolíneas Argentinas y Austral durante buena parte de la década del ´90, la compañía Venezolana Internacional de Aviación Sociedad Anónima (Viasa), que era la principal línea aérea de Venezuela, perteneció a Iberia. En 1997, luego de seis años de administración por parte de la firma española, la empresa quebró y sus empleados se quedaron sin trabajo. Cuando se quiso reflotar la compañía en el último lustro, surgió Conviasa, que pertenece al Estado.
El caso de AR y Austral es similar, teniendo en cuenta que estuvo bajo control privado durante 18 años. En 1990, cuando el entonces presidente argentino, Carlos Menem, decidió privatizar a las dos empresas, fue Iberia, perteneciente al Estado español, la que se hizo cargo de la administración.