Mejorarán los Refugios
Dado que los refugios de montaña fueron pensados hace 50 años, y el movimiento en la montaña aumentó en forma considerable desde entonces. Por eso desde el Club Andino y Parques Nacionales se contrató a un asesor para trabajar en el tema del tratamiento de los residuos. La idea es planificar los refugios a largo plazo y determinar qué servicios deberían brindar.
Los refugios de montaña no fueron pensados para recibir la cantidad de gente que reciben actualmente y las instalaciones comienzan a ser insuficientes, reconoció Mariano Calvi, del área de Uso Público del Parque Nacional Nahuel Huapi. Un caso distinto será el Refugio de las Nubes que está pensando en forma más moderna "con todo analizado desde la base", de modo que contará hasta con una miniturbina para generar electricidad, entre algunos detalles.
La historia cambió, hoy los refugios son un producto turístico y "Parques quiere acompañar el desarrollo turístico pero respetando lo que es un área protegida, lo que llevará un tiempo". Por ello, según informó Calvi, están trabajando en planificar cómo van a ser los servicios en los refugios de acá en adelante, por los próximos 20 años. Al mismo tiempo, agregó que no es una tarea sencilla porque tiene que ser rentable y el concesionario debe brindar servicios básicos.
En cuanto a los sistemas sanitarios y los residuos, señaló que en principio no tienen constancia de que esté funcionando mal, pero Parques trabaja junto al Club Andino para realizar un taller conjunto para planificar los refugios a largo plazo en cuanto a basura, provisión de energía, picadas de acceso y servicios que tienen que brindar.
Insistió en que fueron pensados hace 50 años y están colapsados en cuanto a la capacidad de alojamiento, y demás. Por ello se debe definir cuáles son los servicios que se brindarán a nivel comodidad, seguridad y resaltó también que sería necesaria la reserva previa para evitar colapsos.
En cuanto a los sistemas cloacales, Calvi señaló que en algunos lugares hay defectos y se está trabajando para mejorarlo.
Reconoció que en algunos refugios es más fácil tratarlos que en otros, dado que en suelos más minerales como el Meiling la situación se complica más, que en los casos donde el límite es el bosque, con suelos más húmedos. Se contrató a un profesional para asesorar en el tema y según adelantó Calvi en los próximos cinco años se verán algunas modificaciones.
En cuanto a los residuos que se generan en los refugios, resaltó que la pretensión es que se procese todo lo más posible. En primer lugar se separa lo biodegradable de lo no biodegradable que debe ser devuelto a la ciudad. Calvi destacó que el refugio Meiling fracciona todo, en plásticos, latas y demás, en forma bien detallada. Para bajar la carga algunos utilizan el caballo pero esta medida no es recomendada ni fomentada por el parque porque las picadas no están diseñadas para esto.