El Lago Nahuel Huapi, ubicado entre las provincias de Neuquén y Río Negro, en la Patagonia argentina, es de origen glaciar. Se destacada por su profundidad y siete ramificaciones o brazos: Campanario, Tristeza, Blest, Machete, del Rincón, Ultima Esperanza y Huemul. Sus aguas de un intenso color azul, islas y paisajes majestuosos que lo acompañan, lo convierten en uno de los lugares más atractivos del sur argentino. No por nada la zona se convirtió en el primer Parque Nacional de la Argentina en 1934.
El Brazo Tristeza es uno de los sitios del lago menos explorados, ya que hasta el momento, era únicamente accesible mediante embarcaciones privadas. Hace años lo recorrían barcos como único medio de transporte en la región debido a que los caminos eran muy precarios. La navegación por allí se ligó en principio al comercio, a la explotación forestal y al transporte de mercadería entre las diferentes poblaciones de las costas. En los alrededores surgieron astilleros que construían lanchas de madera, que hoy ya no existen.
Como propuesta turística, desde los primeros tiempos la navegación del Lago Nahuel Huapi constituía un fuerte atractivo. Antes de los años ’20 ya se ofrecían las más variadas excursiones lacustres combinando la visita a distintos puertos.
Exploración Brazo Tristeza es una nueva opción para llegar a uno de los rincones menos conocidos del Parque Nacional. Propone a sus pasajeros un paseo al corazón de los Andes, que recorre un tranquilo fiordo glaciario rodeado por imponentes montañas y frondosos bosques. El desembarco permite observar inmensos árboles, y una naturaleza que sorprende siempre, avistando distintas aves, contemplando las cascadas que van apareciendo en el camino o las nieves eternas del Cerro Tronador. La ciudad de San Carlos de Bariloche siempre está dispuesta para sus visitantes. Los guías del paseo brindan gustosos todos los detalles. Con la reactivación de los vuelos en verano, la experiencia de la magia del Brazo Tristeza, se vue