Gualeguaychú y el desafío del verano que viene
El fin de semana de marzo que coincidió con el feriado nacional por el carnaval, Gualeguaychú vivió una experiencia inusual: unas ochenta mil personas optaron por nuestra ciudad, porque estaba anunciada una noche más del Carnaval del país y porque el destino está muy cercano para prolongar las vacaciones. Desde la Secretaría de Turismo, el técnico en Turismo Fabián Godoy señaló que para evaluar la temporada y el fin de semana excepcional de marzo tendrá lugar en los primeros días de abril una reunión ampliada con todos los prestadores. Entre los objetivos está analizar qué se hace de aquí al verano y consideró que “aquí coincidió gente que ya había vacacionado en algunas de las cuatro quincenas anteriores, que en esta ocasión salió en forma simultánea, de allí que hayamos tenido tanta presencia de turistas”. Godoy dijo a EL ARGENTINO que “se dio el feriado de carnaval y a esta altura los grupos jóvenes, los grupos familiares y parejas identifican Gualeguaychú con carnaval. Por eso tuvimos tanta gente, en promedio, más que Mar del Plata: registramos ochenta mil personas contra casi trescientas mil que tuvo Mar del Plata, pero con una capacidad de alojamiento para veinticinco mil contra la de ellos, que es de cien mil”.
Respecto de la capacidad de alojamiento, especificó que es de aproximadamente para diez mil personas en hoteles, cabañas, departamentos y casas, más otras 14 ó 15 mil en campings.
En cuanto a la gastronomía, consignó que “el número de tenedores no supera los cinco mil. Los prestadores mueven cada mesa en una buena jornada, entre tres y cuatro veces en cada comida”.
Claro que no todos almuerzan o cenan en restaurantes o pizzerías, sino que los acampantes, por ejemplo, se surten en los supermercados, panaderías, carnicerías y almacenes
Esa es la razón por la que la ciudad se quedó sin dinero en los cajeros automáticos, sin pan, sin gaseosas e incluso, sin cerveza.
“Esto tiene que ver con la previsión. La gente esperaba muchos turistas pero no el número que llegó, que nos superó a todos”, admitió nuestro interlocutor.
“Ya desde el 10 de febrero, de cada diez llamados que teníamos en la oficina de turismo, ocho eran para ese fin de semana largo”.
Sabiendo de la demanda que había, Godoy señaló que hubo reuniones con los prestadores en las que se les informó de lo que estaba sucediendo, incluso el miércoles anterior al fin de semana largo.
“También lo dijimos en los medios de comunicación”, afirmó, para agregar “no obstante, debimos derivar a Concepción del Uruguay, Larroque, Urdinarrain, Gualeguay y hasta a Colón”.
Volviendo sobre los faltantes que se registraron, el funcionario consideró “creo que al que no le llegó tanto esto fue al mayorista, el almacenero o el supermecadista, que no vieron que iba a venir tanta gente y no repusieron mercaderías”.
También habrá que tener en cuenta, para el verano próximo, las previsiones que los ciudadanos debamos hacer.
El Intendente de la ciudad, Juan José Bahillo recordó al hablar de este tema, el caso de la ciudad de Victoria, donde previo al paso del rally Paris-Dakar, los vecinos se abastecieron de combustible, de mercaderías, habían concurrido con tiempo a los cajeros automáticos, una experiencia que bien podríamos replicar aquí cuando se anuncie un fin de semana fuera de los común.
Volviendo a Godoy, reconoció que “todo se vio saturado: el tránsito tuvo atascos por exceso de vehículos, la basura se recogió siete veces más que un fin de semana común de carnaval, y si bien en la oficina trabajamos mucho más (el plantel con los refuerzos de verano suma 24 personas trabajando en la atención del turista) porque había que conseguir lugar para que la gente pudiera dormir (aquí vienen las derivaciones hechas a otras ciudades), sorpresivamente no tuvimos quejas”.
Agregó que en la oficina “solemos tener entre dos y tres quejas por fin de semana, y esta vez no las hubo, de manera que el tema no fue complicado y tampoco faltaron energía eléctrica y agua, cosa que en otros momentos ha sucedido. Estos servicios, con dos ciudades en una, no fallaron -destacó, agregando que “tampoco hubo problemas de inseguridad”.
Esto último no ha de haber pasado desapercibido para el público bonaerense, ávido de tranquilidad y seguridad.
Pensando en el próximo verano
Si bien la enorme cantidad de gente trajo alivio a los prestadores y a la ciudad toda, porque cada persona deja recursos en el circuito económico local, hubo situaciones que debieron resolverse a fuerza de criterio y buena voluntad.
Aún así, el Intendente Bahillo consideró “es un tema para seguir trabajando. Fue un fin de semana largo muy excepcional, tenemos que estar atentos, pero no podemos diseñar la ciudad pensando que todo el verano será así. Tenemos que prestar atención porque ya sabemos que cada feriado de carnaval será un momento especial: este fin de semana nos visibilizó algunas problemáticas que tendremos que trabajar para que no se repitan”.
La secretaria de Planeamiento, arquitecta Amalia Peroni, compartió este criterio señalando “comparto lo dicho por el Intendente, en cuanto a que no podemos tomar el fin de semana largo como la media de todo febrero” y consideró “creo que esto va a suceder cuando coincida el fin de semana largo de carnaval. Gualeguaychú será elegida por el espectáculo que tenemos. Pero - reiteró- no podemos preparar la ciudad para tanta gente durante el verano, porque esta no será la realidad, pero sí prever esos fines de semana o determinadas ocasiones en las que tendremos un número mayor de visitantes al que habitualmente tenemos”.
“Creo que podemos generar cuestiones excepcionales para estos fines de semanas que nos pueden servir para otros, en otras épocas del año”, estimó, en el sentido de “tener previsto un mecanismo para llegar a ampliar la oferta de alojamiento”.
“Más allá de que nosotros desde el área (la Secretaría de Planeamiento municipal) propongamos algunas cuestiones, este fenómeno sorprendió a todos, porque se vio la ciudad colapsada en todos sus aspectos”.
En relación con la ampliación de espacios disponibles, la funcionaria dijo “esto tendrá que surgir de encuentros con los prestadores turísticos, grupos de la comunidad para proponer distintas ideas. Una es buscar espacios públicos que no tienen ese uso como La Delfina y el Balneario municipal, en los que de manera puntual y excepcional, se podrá permitir acampar. También se puede pensar en otro espacio público, dejando abierta la posibilidad de abrir el predio contiguo a la reserva ecológica pero lógicamente, con la infraestructura sanitaria adecuada.
“Hay que ver los espacios que disponemos y qué condiciones tienen, preservando los que deben ser cuidados”, afirmó y pensando en voz alta abrió el juego cuando dijo “incluso los clubes podrán generar algún tipo de alternativa para cuando se presente esta situación”.
“También muchas casas de familia aún no inscriptas en el listado de la Municipalidad, podrían colaborar ingresando a un listado alternativo para momentos como éstos”.
Peroni no desatendió la cuestión de los sanitarios, baños públicos necesarios en cercanías del corsódromo y también en los lugares de mayor concentración, cuando señaló “tendríamos que poner sanitarios en distintos puntos de la ciudad para que la gente tenga acceso e incluso pueda cambiarse, (similares a los cambiadores ubicados en las playas en varias ciudades balnearias, casillas que se mantienen con auspicio comercial) y en esto todos podemos aportar ideas”.
“Creo que primero debemos hacer la salvedad de que fue un fin de semana atípico, que nos superó considerablemente y dentro de todo, debemos destacar que la ciudad funcionó”.
Aun así, al terminar consignó “lo vivido nos debe servir para que veamos mecanismos de alerta, porque la demanda será mayor. Debemos tener un circuito armadito para que no nos sorprenda una llegada de gente mayor a la esperada”.