A las discusiones salariales que se vienen desarrollando desde hace un tiempo en el sector, se suma un nuevo conflicto que amenaza el normal desarrollo de la actividad. En este caso se trata de los trabajadores de Parques Nacionales asociados en ATE que desarrollan un plan de lucha en dos direcciones: por un lado, una reivindicación salarial ante el Estado en su papel de empleador y, por el otro, lograr las históricas reivindicaciones de la sectorial de los guardaparques -y la del personal del Sistema Nacional de Empleo Público (SINEP)-, y la  unificación de ambas sectoriales, a fin que los trabajadores de la Administración de Parques Nacionales tengan un convenio colectivo de trabajo propio.
Por estas razones vienen desarrollando un plan sistemático de paros durante las últimas semanas que se van a intensificar hasta el 19 de julio -plenas vacaciones de invierno-, día en que realicen el plenario nacional donde decidirán cómo continuar el plan de lucha. Según explicaron, en los Parques Nacionales de los principales destinos turísticos donde la gente vaya de vacaciones no habrá personal desarrollando sus tareas. “Es un paro total en todas las áreas protegidas”, afirmó a Mensajero el coordinador general de Parques Nacionales de ATE, Jorge Amorino.

Los reclamos
ATE exige, además del aumento de sueldos, la apertura de la discusión de un Convenio Colectivo de Trabajo para los trabajadores de Parques Nacionales, ya que en la actualidad hay dos leyes diferentes que regulan el trabajo para el personal. Además solicitan la reapertura de la sectorial 1455 para sumar a todo el personal en ese convenio colectivo.
También piden una urgente convocatoria a concurso de cargos, por los 166 puestos financiados, ya que “esa es la manera justa y legal de acceder a ellos”. Cabe destacar que la promoción de grados de los trabajadores está congelada desde hace tres años y hay sólo cinco categorías de ascenso, según informaron desde ATE.
“Desde hace unas semanas estamos tomando medidas de fuerza. Primero hicimos un paro de 24 horas y nos hicimos presentes en la Secretaría de la Función Pública para que nos reabrieran las paritarias. Pedimos un 30 por ciento de aumento y que se abra el Convenio Colectivo de Trabajo que discute también cuestiones de carrera, nuevas modalidades operativas de trabajo, plata en negro que nos paga el Estado que necesitamos que pase al salario y que se unifique la sectorial. Es más que discutir la pauta salarial”, dijo Amorino, quien además comentó que la semana pasada hicieron un paro de 48 horas, que esta semana habrá paró de martes a jueves y que pararán otras 72 horas la semana próxima.
“También manejamos las brigadas de incendios forestales y en Córdoba comenzó la temporada de fuegos. Estamos de paro y en la asamblea que se realizó en la provincia decidimos no dejar guardias; con lo cual no sabemos quien va a apagarlos”, agregó.

Interna gremial y política

El conflicto que lleva  a los trabajadores de Parques Nacionales tiene dos aristas fundamentales. Por un lado, el conflicto con el Estado por el aumento de sueldos. Por el otro, la interna gremial que mantienen con la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), que deriva también en las acciones de fuerza.
Sobre la génesis de la interna, Amorino explicó: “El decreto 1455 por el cual se le da un formato normativo a la estructura de los guardaparques es del año 1987 y nunca se trató como convenio colectivo. Lo más llamativo es que en el 2005 nos reconocen como sectorial del convenio general pero nunca lo trataron como convenio colectivo. Todas estas reivindicaciones no podemos discutirlas porque UPCN en connivencia con el secretario de la gestión pública, Juan Manuel Abal Medina, han decidido desde el 2006 a esta parte que Parques Nacionales no tenga un convenio colectivo por un capricho de ellos”. Para entender mejor la interna habría que hacer el paralelismo a otras esferas y entender que ATE responde a la CTA y UPCN a la CGT –que cuenta con el apoyo del ejecutivo-.
Esta situación lleva a que en la actualidad haya dos leyes que regulan el trabajo. Una parte está en el Sistema Nacional de Empleo Público (SINEP) y el otro bajo la órbita del Decreto 1455. “Primera irregularidad porque el mismo empleador tiene dos regímenes laborales distintos. Esto comienza en el año 1987, antes de esa fecha todos estaban bajo un mismo escalafón. La Ley de Parques Nacionales sólo prevé el cuerpo de guardaparques, no prevé otro sistema de empleo. Esto implica complicaciones administrativas y que los salarios sean distintos -incluso por el mismo trabajo en la misma zona-”, comentó Amorino.</addres