Con la mira puesta en un mayor desarrollo del turístico interno, desde el 2010 el Gobierno Nacional encabeza una renovada política de feriados que permite extender el movimiento turístico a lo largo de todo el año, para así romper con estacionalidad y activar las economías regionales.

Fijados de antemano y buscando la previsibilidad en pos de planificar diferentes actividades para desarrollar en el país, el reordenamiento de feriados se ha convertido en un pilar insoslayable de las economías regionales, generando cerca de un millón de puestos de trabajo.
Esta tendencia de “escapadas”, consolidada en los últimos meses también parece ser un aliado vital para muchas agencias de viajes que comenzaron a prestar mayor atención al turismo nacional. En efecto, y ante la caída del turismo exportativo, los fines de semana largos parecen ser la alternativa para un negocio que se encuentra en baja.
En esta sintonía, y con los precios de venta para paquetes en el exterior cada vez más altos, los viajes cortos a lo largo de todo el año van tomando fuerza para suplir las pérdidas, y en más de una ocasión, obligando tanto a los operadores como a las agencias a reconvertir su modelo de comercialización y cambiar el eje de trabajo, siendo los destinos nacionales la nueva vedette en el canal de ventas.

Buscando un aliado
“Las agencias de viajes como tal están capacitadas para vender cualquier destino”, comenzó diciendo el presidente de la AAAvyT, Fabricio Di Giambattista. A su vez, explicó que “obviamente a veces se producen sinergias en el nicho de negocio que hacen que una empresa elija qué producto comercializar mejor”. En este sentido, sostuvo que es difícil que una agencia especializada en un segmento se vuelque a otro ante una coyuntura porque pierde profesionalidad. “Se necesita de capacitaciones e interiorizarse sobre los destinos, porque no hay que olvidarse que calidad va sobre cantidad”, dijo el dirigente empresarial; y añadió: “la rentabilidad que deja uno y otro producto es totalmente diferente y ahí es donde se complica la reconversión de las empresas”.
Además, Di Giambattista valoró el reordenamiento de feriados que contribuye a la venta anticipada y previsible. “Para el turismo interno, desde la AAAVyT avanzamos en acuerdos como el de la Argentina en Bus y buscando productos nuevos, ofertas y alternativas con Aerolíneas Vacaciones ”

En carne propia
“Es tiempo de sentarse y analizar las necesidades y demandas del mercado”, sintetizó José González, Socio Gerente de Turismo BomBini. En esta línea, remarcó que una de las soluciones para compensar las pérdidas ocasionadas por la significativa baja de las ventas de turismo emisivo es reforzar los productos turísticos nacionales. “No se trata de ofrecer los destinos tradicionales como Bariloche, Perito Moreno o Cataratas, que si bien hay que tenerlos, la intención es reconvertirse con itinerarios de alta gama, turismo aventura o productos especializados por segmento”, detalló el empresario. Al respecto, González ejemplificó: “deberíamos poder vender más cabañas en San Martín de los Andes, circuitos por la Ruta del Vino u otras rutas gastronómicas, circuitos itinerantes por el Norte, o Pueblos Turísticos, son algunas de las propuestas que deberían ofrecerse con más atención y calidad”.
A su vez, también desde la región centro, un agente de viaje que pidió respetar su anonimato remarcó que tras una baja del 70% de los vuelos al extranjero hubo muchos pasajeros que volcaron su oferta hacia los destinos nacionales. “Esta situación nos encontró con un equipo de trabajo sin la preparación acorde para comercializar productos nacionales no tradicionales. Tuvimos que salir a comprar y armar paquetes a última hora. La Costa Atlántica y el Norte argentino, fueron los lugares más buscados”.
Por su parte, el dueño de Turismo Bacur, Ariel Giménez, sostuvo que el verano se sobrellevó porque las salidas diarias a la Costa Atlántica se multiplicaron respecto a años anteriores. “Las caídas en las ventas de Brasil y Chile fueron notables, pero explotando Córdoba y Mar del Plata pudimos redireccionar el negocio aunque los márgenes de ganancia fueron inferiores”. A su vez, Giménez remarcó: “Nadie puede negar que se ha perdido mucha plata, pero si nos quedamos llorando es peor. Debemos aprovechar la previsibilidad de los feriados largos y seducir a los pasajeros con varias escapadas a lo largo de año”.
A su turno, Claudia Lamarque, Gerente General de Agaxtur, explicó que el vuelco del mercado hacia el consumo de productos nacionales por encima de los extranjeros es cierto. “Si bien siempre nos caracterizamos por ofrecer destinos de Argentina a la par de los internacionales, ahora el trabajo se ha reforzado porque se está vendiendo más el país”, dijo Lamarque. Por último, sostuvo que “si bien Bariloche, Cataratas, Córdoba y El Calafate, son los lugares que más se venden, es necesario agrandar la oferta porque la demanda de pasajeros se expandió”.
Por otra parte, Rodolfo Bor, Presidente de Opciones Argentinas, declaró que desde ahora “el que tiene todas sus miras en el producto internacional tendrá que renovarse y lo reemplazarán con productos nacionales, lo que implicará un aumento significativo en el número de operadores que trabajen con destinos dentro del país”. Al respecto añadió: “Seguramente los circuitos itinerantes como los destinos del Norte y Patagonia se venderán muy bien, porque al cliente que perdiste afuera tenés que seducirlo dentro de la Argentina. La competencia será muy grande para este año”. En esta línea, comentó que “muchas personas modificaron su destino a último momento, relegando el exterior por el producto nacional y utilizando los fines de semana largos para viajar”.
En conversaciones con este medio, respecto a la “reconversión” de algunas empresas que apuntan sus cañones al turismo nacional, el titular de Aaovyt, Alberto Crupnicoff, sostuvo que “el cambio no puede ser objeto de una improvisación, sino que requiere de decisión empresarial para montar una estructura adecuada y estable para mantener en el tiempo y ofrecer un servicio a la altura”. Y agregó: “Hay empresas que abren o refuerzan sus Departamentos de turismo interno o receptivo porque la coyuntura los está acorralando; pero esta decisión también requiere una inversión”.
Asimismo, Crupnicoff señaló: “Uno puede generar y producir nuevos productos en todos los órdenes, pero para que sea seria no puede estar ligada a los vaivenes del mercado, estamos frente a un tema serio y complicado que no se soluciona con medidas a corto plazo”.
Además, el Presidente de Aavyt advirtió: “La tendencia marca que la gente está accediendo al dólar para ahorro y se sabe que hay pasajeros que van a comprar paquetes turísticos a Uruguay, Chile o Paraguay”.
Por último, el dirigente resumió que “numerosas empresas podrían encontrarse en peligro, al verse imposibilitadas de sostener sus estructuras frente a una caída sostenida de tales dimensiones. Esto hace que algunas empresas tengan que hacer ajustes y cambiar sus paradigmas de negocios”.
Desde el Jardín de la República son varios los que coinciden en que el turismo interno permitirá sostener la actividad hasta que se recupere el mercado emisivo. Eduardo Brito, titular de Yastay, Viajes y Turismo, indicó que el turismo interno es una alternativa para las compañías del sector, y destacó las oportunidades que generan los feriados largos que impulsa el Gobierno. “No es fácil reconvertir al turismo receptivo a una agencia que sólo vende servicios al exterior. Este cambio exigiría una inversión, ya que cada agencia tiene su especialidad propia. Para modificar de rubro, entre otras cosas, habría que capacitar al personal y eso tiene un costo elevado”. Por su parte, Santiago Olmos, encargado de ventas de una agencia de viajes de Tucumán, subrayó que para vender destinos argentinos se requieren conocimientos sobre un mercado distinto. “Es una actividad diferente, que tiene otro público, otros costos y otros proveedores. Habría que capacitarse para conocer a fondo el funcionamiento de este negocio”, razonó.
El presidente de Consult House, Juan Carlos Chervatin, enfatizó que el mercado nacional sumado al receptivo no tiene el volumen de ganancias que genera el emisivo. Además, resaltó: “El turismo interno no suele pasar por las agencias de viajes, y menos aquel de los fines de semana largos, donde el consumidor suele comprar directo”. No obstante, y de la mano de una reconversión, admitió que para reducir las pérdidas en su empresa se están generando nuevos productos relacionados con servicios de Alta Gama, Aventura, Deporte y Gastronómicos dentro de la Argentina.

Lo que viene
Con el calendario de feriados estipulado de antemano, y habiendo experimentado otro fin de semana largo exitoso en todo el país (24 de marzo), nuevas fechas se avizoran y la actividad turística empieza a vislumbrar un horizonte algo más optimista. Para los próximos meses se palpita el corte de semana que llega con el 2 de abril; las fechas de Semana Santa entre el 17 y el 20 de abril; y el puente turístico del 1º y 2 de mayo. Será tiempo de cambiar y seguir mirando hacia adelante.

Argentina para todos los gustos
“Sin lugar a dudas que la Argentina está más que capacitada para hacerse cargo de la masa de público que no sale al extranjero y vacaciona por el país”, sostuvo Patricia Vismara, Subsecretaria de Promoción Turística Nacional, en diálogo con este medio.
En esta línea, agregó que Argentina tiene una oferta extraordinaria, más allá de los destinos tradicionales. “Hay muy pocos países que tienen la oferta de nuestro país, tanto en materia de recursos naturales, culturales, del equipamiento turístico, como la conectividad que hoy posee Argentina”, dijo. A su vez, la funcionaria explicó: “Acá lo importante que la oferta turística del país sigue creciendo, diversificándose, renovándose e incorporando nuevos productos constantemente”.
Planteado en el Plan Federal Estratégico de Turismo Sustentable, Vismara resaltó que “es vital que los operadores comercialicen destinos emergentes a la par de los tradicionales, para que haya una distribución equilibrada y equitativa para lograr una actividad sustentable en todo el territorio nacional”.
Por otra parte, señaló que las escapadas están instaladas en el consumo turístico del argentino, e indicó que “la tendencia es elegir destinos diferentes y no sólo sol y playa. Todas las regiones del país tienen un altísimo nivel de ocupación durante la temporada de verano e invierno.