David y Goliat parte II, o la lucha por los Repro
Los subsidios del Programa de Reactivación Productiva (Repro), que ya generaron polémica en Bariloche, ahora lo hacen en Mendoza. El Repro es un mecanismo por el cual el Estado, a través del Ministerio de Trabajo, y financiado con fondos de la Anses, se hace cargo de una parte de los salarios de las empresas, mediante un subsidio de 600 pesos por trabajador por un máximo de doce meses, de acuerdo a lo que informa oficialmente el ministerio.
En cuanto a la aplicación particular en Mendoza, Luis Böhm, secretario de Turismo de la provincia, confirmó a Mensajero que allí será de 400 pesos por trabajador durante tres meses y que el objetivo es que llegue a quienes realmente lo necesiten.
De todas maneras, y al igual que en Bariloche, surgieron algunos comentarios que critican la distribución de los subsidios aunque con aristas diferentes. En ese sentido, Alberto Romero, presidente de la AEHGA (Asociación de Empresarios Hoteleros y Gastronómicos de Mendoza) señaló a un medio local: “Es irrisorio e irrelevante frente a la cantidad de trabajadores de firmas habilitadas en la provincia, Y siendo un salvataje para todo el sector son demasiados los requisitos a cumplir”.
Por eso Mensajero consultó a Luis Böhm, sobre los requisitos para estos subsidios: “Los requisitos para presentarse son bastante flexibles: estar inscripto legalmente, presentar un informe económico justificando cuál es la situación de la empresa en particular, balances de los últimos años, libros de pasajeros del último mes en el caso de los alojamientos y estar al día en los aportes sociales, obviamente. No es tan complicado” y además aclaró: “No se presentaron tantos como esperábamos. En Bariloche fueron 2.300. En Mendoza se han presentado 425 empresas tanto de hotelería, como de gastronomía y agencias de viajes”
Varios niveles de crisis
Böhm explicó los diferentes planes de acuerdo a la gravedad de la situación: “La política que establecimos es que aquellas empresas que estén realmente en crisis, con riesgo de despidos o suspensiones, reciban una ayuda. Nuestra prioridad es la protección del empleo. Entonces a quienes están en terapia intensiva, le damos un subsidio de 400 pesos por trabajador por tres meses, con el compromiso de no despedir ni suspender a nadie; a los que necesitan oxígeno, le hemos diseñado una línea de créditos al capital de trabajo enmarcados en el Fondo para la Transformación y el Crecimiento de hasta 120 mil pesos a una tasa del 5,4 por ciento anual en pesos. Esto ya está en funcionamiento e inclusive se tuvo que flexibilizar un mecanismo para que pudiera ser utilizado para el pag