Funcionarios del Poder Ejecutivo junto a diversos sectores de la sociedad salteña emprendieron un trabajo conjunto para imponer el nuevo trazado de la ruta nacional Nº 40 proyectado por la Dirección de Vialidad de Salta. Este mediodía se realizó una reunión de trabajo donde el director del organismo vial, Gerardo Villalba, explicó los fundamentos de la propuesta local para esta vía de comunicación.
En este sentido, las partes interesadas realizarán un informe sobre cada área que contenga un diagnóstico actual, las proyecciones de la potencialidad para Salta y la visión geopolítica estratégica. Con la información que se presentará el 30 de abril, posteriormente se elaborará un documento oficial que justifique el trazado propuesto por la Provincia.
La propuesta salteña es que se respete el paso histórico de la ruta nacional 40 por San Antonio de los Cobres, superponiéndose desde esta localidad con la ruta nacional 51 hasta cercanías de Alto Tocomar, entre Olacapato y Alto Chorrillos, para continuar hacia el norte en dirección a la provincia de Jujuy.
De esta manera no se afectarían los intereses de las comunidades salteñas de la zona, no se producirían daños ambientales y sería más beneficiosa en términos económicos a la propuesta impulsada por Jujuy. La propuesta de Vialidad de Salta no afecta en nada a los objetivos o intereses planteados por la vecina provincia de vincular sus localidades la ruta 40, en cambio si Vialidad Nacional sigue con la propuesta jujeña aislaría a miles de habitantes del departamento Los Andes.
Estuvieron en esta reunión el ministro de Educación, Leopoldo van Cauwlaert; el representante de Salta ante organismos internacionales y Zicosur, Hernán Cornejo; el secretario de Planificación Estratégica, Dante Apaza, y de Minería, Ricardo Salas.
 
Fundamentos  
Al superponer en todo este tramo a las rutas nacionales 40 y 51 se mejoraría la comunicación vial a poblaciones como Olacapato y su área de influencia sobre Santa Rosas de los Pastos Grandes, Tolar Grande, Salar de Pocitos y Caipe. Además Vialidad Nacional cumpliría también con el viejo pedido de Salta de avanzar con la pavimentación de la ruta 51 en dirección a Chile.  
En materia productiva, ahorraría costos de operación y tiempos de viaje para el transporte minero y fortalecería la ruta 40 como eje del circuito turístico de la Puna salteña, aprovechando su alto potencial para esta actividad.
La propuesta salteña aprovecharía relieves favorables y principalmente no afecta en forma irreversibles reservorios de agua dulce, como sí lo hace la propuesta jujeña que pretende pasar por la vega de Socaimán, una de las principales fuentes de agua para San Antonio de los Cobres.
Como conclusión desde un informe realizado por Vialidad Provincial se marca que las rutas nacionales deben responder a los intereses de las provincias que atraviesan, teniendo en cuenta aspectos económicos, sociales y ambientales.