Como  consecuencia del incremento de la oferta y la demanda de las actividades de turismo alternativo se reglamentará la actividad a los efectos de desarrollar una normativa que integre la gestión de la calidad, la seguridad y la preservación del ambiente a fin de brindar a los usuarios un servicio más seguro y de mayor calidad.

Según adelantó la jefa del Subprograma Ecoturismo, de Reunión y Turismo Activo, Silvia Rapisarda, el riesgo, la peligrosidad o la posibilidad cierta de producir un daño, forma parte de la propia definición de las actividades incluidas dentro del turismo alternativo.

Por ello desde el  Ministerio de Turismo y Las Culturas se ha trabajado en un proyecto de ley de turismo alternativo, el cual se pondrá a consideración de los diferentes municipios y del sector privado vinculado al tema de referencia, para que en una reunión de trabajo que se llevará a cabo el martes 23 de febrero a las 10:00 en el Muhsal se puedan realizar las sugerencias y observaciones pertinentes.

“Lo que se impulsa es la creación de un registro de prestador y/u operador de turismo alternativo, en el cual deberán inscribirse todas aquellas personas físicas o jurídicas habilitadas que oferten y/o desarrollen en forma directa actividades del mismo, como también las agencias de viajes y empresas de viajes y turismo, que a su vez presten alguna actividad de turismo alternativo”, adelantó Rapisarda, quien destacó que este registro va a otorgar seguridad jurídica al turista y al prestador, delineando las actividades, las condiciones de seguridad y el modo de realización de las mismas en el ámbito de la provincia, exigiendo además que se desarrollen de modo sustentable.