Provincias: la importancia del turismo como industria
Tanto San Juan como Tucumán, entre otras, modificaron sus leyes provinciales de la actividad para fomentar, desarrollar, promocionar y regular al sector.
Sin dudas, el turismo, como actividad económica, provoca una oferta variada a partir de los consumos que se realizan en todo su itinerario, sin importar el medio de transporte utilizado. Es una práctica social en la que se promueven las relaciones con otros individuos y con el entorno natural elegido al momento de hacer un viaje.
Si bien la actividad es fundamental a nivel internacional, las 24 jurisdicciones de la Argentina reciben un impacto directo notable en sus economías, y más al tener en cuenta el flujo de dinero que se efectúa entre el viajero y cada una de las comunidades locales.
Por ejemplo, a fines de junio de este año, debido a su función estratégica y esencial para el desarrollo provincial, la Cámara de Diputados de San Juan resolvió por unanimidad declarar al turismo como actividad socio-económica de interés prioritario, dentro de las políticas del Estado Provincial. En efecto, los legisladores modificaron la ley existente luego de cincuenta años, además de adherirse al régimen instaurado por la Ley Nacional de Turismo N° 25.997, con excepción a lo previsto sobre infracciones y sanciones.
Por otra parte, la semana pasada, Tucumán confirmó que reconocerá al turismo como industria. De este modo, se harán modificaciones de la ley provincial que adhiere a la Ley Nacional de Turismo.
"Fundamentalmente, la ley se basa en que Tucumán considere al sector turístico como una industria y tenga las mismas ventajas como cualquier otra. Por ejemplo: créditos blandos, plazo de gracia e intereses muchos más bajos para que puedan crecer rápidamente", afirmó Regino Amado, vicepresidente primero de la Legislatura.
En este contexto, Mensajero dialogó con Sebastián Giobellina, presidente del Ente Tucumán Turismo, quien resaltó lo importante que es que el turismo sea declarado como industria. "Hace mucho tiempo que se dice y se insiste en este tema, pero era algo que quedaba solamente en nuestras expresiones, en simples palabras. Afortunadamente, ahora tendrá un sustento legal que lo confirme", sostuvo el funcionario.
"Este desafío abre un abanico de posibilidades y beneficios a quienes trabajan en nuestro sector y los iguala con otras industrias. Alícuotas diferenciales para impuestos provinciales como ingresos brutos y salud pública y el acceso créditos con tasas diferenciales son algunas de las nuevas oportunidades que ahora se generan y posibilitan el crecimiento de los integrantes del sector privado", agregó al respecto.
Posteriormente, Giobellina explicó por qué no estaba adherida Tucumán a la Ley Nacional de Turismo. "Contamos con una Ley Provincial de Turismo, número 7484, creada en el año 2005. Es una legislación moderna, completa y trabajada con toda la comunidad, que contempla todas las particularidades que la actividad tiene en la provincia, por lo que no era necesario adherir a la ley nacional".
Durante la charla, el titular del ETT se refirió a otra ley vigente desde agosto de este año, que crea el Fondetur, cuyo propósito es incentivar la promoción turística a través de fondos obtenidos del pago de ingresos brutos de las empresas del sector: "Esta acción nos permite reinvertir, dinamizar y apostar a nuevos productos innovadores. Celebramos que parte de los aportes del impuesto provincial del sector sea volcado para fortalecer a la actividad, generando una sinergia virtuosa de desarrollo y promoción del destino que, entendemos, será cada vez más potente cuanto más fortalecido se vea el sector a nivel provincial".
Es importante remarcar que algunos de los beneficios más importantes que surgen a partir de la implementación del turismo como una política de estado, o bien, como industria, son:
. Creación de empleo: el turismo permite la generación de. muchos puestos de trabajo por año. A partir de la llegada de más viajeros a una determinada provincia, más empleos se crean.
. Rentabilidad sostenida: por lo general se orienta a los hoteles situados en zonas turísticas muy transitadas, en las que es más fácil obtener beneficios, sin dejar de lado los cuidados del mismo.
. Control de precios: la idea es generar una mayor demanda, precisamente para que los precios sean más altos y se puedan generar más ingresos, siempre y cuando se mantenga cierta coherencia, además de no descuidar los valores que ofrecen las competencias.
. Atracción de inversiones: si una provincia, si un destino es muy demandado, es más probable que los grandes inversores dedican invertir en él y acondicionarlo para que el sector se vea beneficiado.
. Mejora de infraestructura: esta acción es fundamental, precisamente porque hay algunas zonas turísticas que, a veces, resultan inaccesibles.
. Exportación de productos locales: de manera indirecta, si los turistas se acercan a una determinada región o provincia en las que haya productos locales que llamen la atención, seguramente los terminarán comprando y llevándolos a sus ciudades de origen, en las que probablemente terminen teniendo una gran aceptación.
. Calidad de vida: el turismo beneficia a quienes residen en cada una de las provincias, precisamente porque tienen la posibilidad de tener más empleo a partir de las mejoras que se dan en los puestos de trabajo que se generan, en la infraestructura y en los servicios.
. Puesta en valor a nivel cultural: las tradiciones locales, los museos, las artesanías, la gastronomía y demás pasan a tener un valor enorme gracias a los turistas que demuestran su interés en cada uno de estos factores. Además, la actividad permite la creación de áreas naturales protegidas y de lugares de interés turístico regional, nacional e internacional que agrega valor a una determinada zona turística.