NH abre un fabuloso hotel en Amalfi
Entre grutas, limoneros y buganvillas, con un paisaje que por su belleza ha sido declarado patrimonio de la Humanidad por la Unesco, la cadena ha abierto el Grand Hotel Convento di Amalfi, establecimiento perteneciente a la categoría NH Collection, de cinco estrellas con 53 habitaciones y suites.
Todas las estancias tienen vistas al mar y al Paseo de los Monjes, una impresionante pérgola panorámica sobre las tortuosas gargantas de la costa amalfitana. La mayoría de las habitaciones cuentan, además, con balcones y terrazas. Están equipadas con aire acondicionado, conexión WI-FI y todos los servicios característicos de NH Hoteles.
Por su espectacular ubicación, el Grand Hotel Convento di Amalfi pertenece a la categoría NH Collection, que engloba la oferta mas elevada de hoteles de NH. Identifica a aquellos hoteles únicos y exclusivos que por su ubicación, servicio o producto se consideran singulares. Paraísos únicos repartidos por distintos lugares del mundo que aseguran una estancia inolvidable.
Entre los numerosos atractivos del nuevo establecimiento, se destaca su restaurante panorámico ubicado en la quinta planta, que ofrece su encantadora terraza para comer acompañado por la brisa del Tirreno. Su carta combina los exquisitos manjares de la región de Campania con una deliciosa selección internacional. Además, ofrece una carta de coctelería, jugos y snacks junto a la piscina.
Una meticulosa restauración ha permitido rescatar este espectacular inmueble, originario de 1200, ubicado en la llamada gruta de San Cristófaro, a escasos 75 kilómetros de Nápoles.
Antigua basílica, y abadía cisterciense desde 1212, el célebre edificio albergó, a lo largo de su historia, las aulas de la universidad de Amalfi y, ya en el siglo XVII, las clases del prestigioso Instituto Náutico amalfitano. A mediados del XIX, se impidió que acabara convertido en cementerio, según sugería entonces el Ayuntamiento y, desde 1882, el inmueble se utilizó como albergue hotelero. Los sucesivos cambios de uso y la ocupación napoleónica tuvieron que ver con la dispersión de su riquísimo tesoro artístico, conservado sólo parcialmente.
La cuidadosa rehabilitación del maestro Claudio Tenerelli se ha centrado sobre todo en rescatar el claustro original y su columnata, redescubrir la capilla, ornamentada con bellísimas esculturas de madera y un impresionante órgano del 1700 y recuperar los frescos en techos y paredes de las estancias pintadas del quinto piso, muchos de los cuales datan de 1800. Ahora, tras varios meses de intensos trabajos, el Grand Hotel Convento di Amalfi ofrece todos los lujos del siglo XXI en un entorno predilecto por artistas y turistas, que lo retrataron en sus obras y fotos una y otra vez.
Su acceso directo a la playa semi-privada, una cala espectacular con reposeras y sombrillas a disposición de los huéspedes, así como servicio de coctelería y bar, es uno de los grandes atractivos de este establecimiento. El hotel dispone, además, de una espectacular piscina descubierta ‘infinity’, así como de una completa zona de fitness. El Centro de Wellness del establecimiento cuenta con área de masajes, cabinas de tratamiento corporal y facial, baño turco y hammam.
La ubicación del Grand Hotel Convento di Amalfi en una zona de gran belleza de la costa amalfitana, entre las antiguas poblaciones griegas de Sorrento y Positano, permite disfrutar de agradables escapadas por la zona y de una carretera que bordea la costa que recuerda lo más hedonista de la Dolce Vita.
A los encantos turísticos de la tranquila Amalfi -con su apabullante Claustro del Paraíso, su antiguo Museo del Papel y su bulliciosa plaza de Flavio Gioia, junto a los muelles- se unen los innegables atractivos de una región paradisiaca. La lujosa y agreste Isla de Capri, las sobrecogedoras ruinas de Pompeya y Ercolano, el volcán del monte Vesubio o los templos de Paestum son opciones muy recomendables para los amantes de la arqueología, el arte y la belleza natural.
La cercanía del Grand Hotel Convento di Amalfi a Nápoles, a escasos 75 km del aeropuerto de Capodichino, y los excelentes accesos por carretera, barco y tren desde otras localidades italianas, son además indudables ventajas para una inolvidable estadía.