¿Cómo estuvo el primer semestre?
La primera mitad del año fue bastante dura a pesar de que repuntó el emisivo de enero y febrero. Hoy por hoy la gente está entrenada para encontrar tickets en promociones, pero nuestro trabajo está más que nada focalizado en el agente de viajes que tiene su cliente muy particular y muy exclusivo, que ya fue a muchos destinos y que recurren a una asesoría profesional, por lo que lo capacitamos y aconsejamos para encontrar nuevos destinos que rompan con lo tradicional. 

¿No te van a reemplazar por un robot?
(Ríe) Gracias a Dios, Internet todavía no pudo reemplazarlos, además, queremos que los agentes de viajes sepan que en nuestro teléfono y en el e-mail pueden encontrar un aliado para ir más allá de los viajes típicos que ven en las revistas o los diarios. No es que nos creamos “maestritos”, sino que salimos, buscamos, descubrimos y traemos productos exclusivos. 

El receptivo está bastante irregular…
Nosotros seguimos trabajando muchísimo con el receptivo y es nuestro principal objetivo, de hecho, somos emisivos exclusivamente para el Caribe y nada más: nuestra mayor promoción, inversión, viajes y participación en Ferias es para traer pasajeros del exterior a la Argentina. Es cierto que hay menos turistas extranjeros viniendo al país, pero esto se debe a que los mercados van y vienen y las economías mundiales también tuvieron crisis. La temporada es irregular, y depende de cada mercado.
Por eso en estos últimos dos años, hemos sabido tener la cintura necesaria como para que la mesa de operaciones de Travel Mark sea profesional y competitiva. 

¿Qué dificultades encontrás hoy?
Las dificultades son de público conocimiento, y tienen que ver con que la gente empezó a tener otras dificultades por los nuevos impuestos, la declaración, complicaciones en sus empresas. En sí, es un problema económico y social. Todos los agentes de viajes sabemos que fue un semestre duro y una temporada alta donde los turoperadores que pagamos cupos hemos tenido que devolver algunos lugares porque no se vendió todo. Enero o febrero no fue lo que se esperaba… en realidad, no esperábamos nada, sabíamos que no se iba a vender bien. 
Igual seguimos en el ruedo, seguimos vendiendo viajes al Caribe, más que nada a Bahamas, excepto los destinos tradicionales que venden los demás. Ahora estamos  promocionando las islas de Bahamas como Exuma, Andros, Harbour Island, y otros destinos que renuevan las experiencias. 

¿El segundo semestre cómo lo ves?
Eso es un tema, vamos a estar complicados por el tema de las elecciones, porque la gente está esperando a ver qué pasa. En octubre no hemos planificado giras de promoción, vamos mucho con el Ministerio y la CAT para nuestro receptivo, y no las hemos planificado salvo a fin de octubre, cuando ya hayan pasado las elecciones, porque uno tiene que estar acá por cualquier eventualidad. Va a ser un corte en nuestras ventas, pero después creo que la gente va a volver a viajar.  
El año que viene probablemente haya una mejora, de hecho, en estos últimos dos meses se manifestó un alza.