50 millones de euros para renovar hoteles
Iberostar Hotels & Resorts ha anunciado que su objetivo para este año es renovar su cartera de hoteles, una actuación que contará con 50 millones de euros de inversión. Igualmente, la compañía tiene previsto continuar con sus planes de expansión internacional.
Iberostar prevé consolidar su presencia en países en los que ya está presente como España o Túnez y entrar en otros como en Cabo Verde, lo que confirma la "apuesta de la cadena por destinos turísticos emergentes" y por afianzar su "dilatada experiencia en los mejores enclaves vacacionales del mundo".
Además, la cadena "mantiene su compromiso por la calidad en sus servicios" con la reforma integral de dos establecimientos en Mallorca -el Iberostar Cala Barca e Iberostar Royal Cupido-, que reabrirán en primavera de 2010 como hoteles cuatro estrellas.
En las Islas Canarias, el Hotel Iberostar City Hotel Mencey abrirá sus puertas en octubre tras una "profunda reforma" de sus servicios e instalaciones, lo que permitirá a este establecimiento seguir siendo un "referente de calidad" en la capital tinerfeña.
Durante el primer trimestre del año también se empezarán a comercializar en México las unidades residenciales -villas y apartamentos- de Iberostate, la división inmobiliaria del Grupo, que puso en marcha a finales de 2009 sus proyectos en Brasil y la República Dominicana.
En esta misma línea y para "satisfacer la demanda de los clientes más exigentes", el Hotel Iberostar Grand Hotel Salomé -un boutique hotel dentro del Iberostar Anthelia- ha pasado a formar parte de la línea de hoteles exclusivos de la cadena, The Grand Collection, que ya cuenta con siete establecimientos en Méjico, Jamaica, la República Dominicana, Brasil y España.
Posibilidad de entrar en el segmento urbano
La compañía ha añadido que continúa analizando la posibilidad de entrar en el segmento urbano, "bien a través de la adquisición de una cadena hotelera o mediante la incorporación de nuevos establecimientos".
Por último y en lo que respecta a 2009, Iberostar cerró el año pasado con la incorporación de nueve establecimientos y una facturación de 810 millones de euros.
A día de hoy el portafolio de la cadena asciende a 104 hoteles en todo el mundo, en los que trabajan 22.000 empleados.