La nueva normativa de Cataluña obliga a que los usuarios contraten los servicios VTC con 15 minutos de anticipación, que pueden llegar a ser una hora en Barcelona, e impide a las aplicaciones usar la geolocalización de sus vehículos. 

Esta legislación se aprobó luego de la fuerte huelga de taxistas- en Madrid aún continúa- en la cual buscaban una regulación para estas plataformas, ya que las consideran como competencia desleal. 

"Ante las restricciones a las VTC aprobadas por el Govern de Cataluña, nos vemos obligados a suspender el servicio de UberX en Barcelona", señaló en un tuit la empresa.

UberX es un servicio similar al ofertado por los taxis y el más popular de la compañía, que en España también dispone de servicios de alquiler de coches de lujo con conductor y de reparto de comida a domicilio.

Por su parte, desde Cabify afirmaron: "Esta regulación tiene como único objetivo, y por tanto también como consecuencia final, la expulsión directa de la aplicación de Cabify".

"La obligación de esperar 15 minutos para viajar en una VTC no existe en ningún lugar de Europa y es totalmente incompatible con la inmediatez de los servicios bajo demanda, como UberX", denuncia Uber en un comunicado y Cabify sostiene: "El 98,5% de los viajes gestionados a través de la app de Cabify están por debajo de los 15 minutos de espera". 

Debido a esta medida, se calcula que entre 3 y 4 mil personas se quedarían sin trabajo.