A un siglo exacto del comienzo de la construcción del Canal interoceánico, en 1909, se iniciaron las obras para levantar las esclusas del nuevo carril, que a un costo de más de 3.100 millones de dólares permitirán el paso de modernos buques por esa estratégica e importante vía que une al Atlántico con el Pacífico.
En esta fecha empiezan a contar los cinco años y dos meses que el consorcio internacional Grupo Unidos por el Canal (GUPC) dispone para construir las esclusas del nuevo carril, que permitirán el tránsito de embarcaciones mayores que las existentes a comienzos del siglo pasado.
El GUPC está encabezado por la empresa española Sacyr-Vallehermoso y la italiana Impregilo, la belga Jan de Nul y la panameña Constructora Urbana.
La Autoridad del Canal de Panamá ha establecido incentivos económicos y penalizaciones para acelerar la entrega de la obra, con el objetivo de tener la ampliación concluida para el centenario de la apertura del Canal, el 15