La capital de Irlanda tiene un Día D cada año donde todos los rincones de la ciudad se tiñen de verde. El 17 de marzo es St. Patrick’s Day, en homenaje a su santo patrón, San Patricio, y ningún irlandés que se precie dejará de festejarlo. La celebración ya se hizo popular en el mundo. 
En esta ocasión, el viernes 17 se celebró bajo el lema “Irlanda eres tú”, con el que se quiere reflejar la confianza de una Irlanda contemporánea inspirada y formada por su pasado y que mira con optimismo hacia su futuro.
En realidad, desde el 2000, la celebración se estiró a cuatro jornadas, así que durante todo el fin de semana se vivieron las más diversas actividades en la isla Esmeralda. Más de 100 mil visitantes extranjeros desbordaron la capital irlandesa para unirse a los festejos, convirtiéndola en el epicentro de la fiesta nacional más celebrada en todo el mundo. 
Las calles dublinesas se tiñeron de verde para acoger los más de 30 eventos con 3.000 artistas. El momento más destacado fue el Gran Desfile del Festival al mediodía. Cientos de artistas, diseñadores e intérpretes realizaron un recorrido de 3 kilómetros por las calles de Dublín.
Durante el 18 de marzo, los visitantes continuaron la celebración con “The Revolution Will Not Be Televised” (La revolución no será televisada), donde a través de actuaciones y foros de discusión mostraron la revolución que se está produciendo en la Irlanda actual a través de figuras reconocidas dentro de la filosofía, historia, deporte, economía o cultura Este mismo día, más de 4.000 participantes exploraron Dublín en busca de la “Caza del Tesoro”, recorriendo el río Liffey y visitando lugares de interés histórico y contemporáneo. Y para que la fiesta no acabe, Merrion Square cobró vida con un vibrante carnaval el 19 de marzo. 
El domingo, en Merrion Square se realizó el Festival Big Day Out con teatros, artesanía música, espectáculos aéreos y circenses abiertos para todos. Por supuesto, todo fue acompañado con una gran variedad de espacios para disfrutar de la gastronomía local. 
Otras ciudades irlandesas se sumaron a la alegría como Galway y Cork, mientras que en Irlanda del Norte se celebraron diversos carnavales y desfiles en Belfast, Derry-Londonderry o el más destacable en Armagh, donde se celebró el Festival de San Patricio más largo de Irlanda.