Los empresarios de la aeronavegación comienzan a mirar hacia el Paraguay. Desde la semana pasada ha sido aprobada la ley que autoriza que el sector privado maneje tres aeropuertos del país, aunque, como sucedió en España con la medida anti-crisis del gobierno de Zapatero, ya se dejaron oír las voces de aquellos que están totalmente en contra de la medida.
Entre las terminales aéreas que pasarán a manos de privados se encuentra el aeropuerto internacional de Asunción, el principal del país. Además el proyecto incluye a la terminal aeroportuaria Guaraní de Ciudad del Este (Triple Frontera) y al aeródromo de Mariscal Estigarribia, Chaco.
La ley sancionada por Diputados pasó al Poder Ejecutivo para su promulgación. Sin embargo, los sindicalistas aeroportuarios, que se oponen rotundamente a la privatización, adelantaron que elevarán una petición de veto para que sea aprobada por el presidente Fernando Lugo.
Más allá de la estación aerocomercial de Asunción, los otros aeropuertos hoy tienen poco tráfico y una necesidad de mejora de su infraestructura, aunque poseen una gran ventaja: están ubicados en sitios que resultan estratégicos para la aeronavegación en la región.