El comportamiento responsable con el medio ambiente es un requisito que influye mucho más que antes en el desarrollo del turismo. Los hoteles y las agencias de viajes se esfuerzan por adquirir el certificado “verde” que compruebe su comportamiento ecológico. La ecología se convierte no sólo en una cosa buena, sino también en un buen negocio.
El agroturismo se desarrolló rápidamente, por ejemplo, en Italia, Francia o Irlanda. En cuanto a República Checa, encontró condiciones favorables sobre todo en la región de Sumava y otras partes de Bohemia del Sur, y se va imponiendo en zonas tales como Vysocina, Ceský ráj (Paraíso Checo) o Valassko.
Los ecohoteles ponen un gran énfasis en el ahorro de energía. Las ventanas y los revestimientos de edificios son aislados térmicamente, hay radiadores regulables y alumbrado ahorrativo. Es indispensable asegurar también el uso eficiente y ahorrativo del agua potable. Todas las baterías de agua en las habitaciones limitan el flujo de agua a menos de diez litros por minuto. Todos los desperdicios se separan, incluidos aceites y grasas. En República Checa hay 120 establecimientos de este tipo, de ellos cien en el campo, que recibieron tal