El pasado año, el país recibió a 651.262 visitantes extranjeros e ingresó 343 millones de dólares del sector turístico, una cifra superior a la de 2008, cuando la derrama fue de 314 millones.
Según el viceministro de turismo, Iván Cahuaya, el proyecto favorece el auge económico y social de las familias indígenas y campesinas, que nunca tuvieron una participación directa en la industria del ocio. El funcionario recordó que el BID ya erogó una suma similar para fomentar el acceso de visitantes al Lago Ricacha, en el altiplano.
En ese sentido, señaló que la política del vice-ministerio establece que en la región de atractivo natural donde el gobierno determine construir un aeropuerto, se implemente un complejo turístico en coordinación con las organizaciones sociales del lugar. “Ese complejo se desarrollará bajo el modelo de gestión comunitaria en alianza con el Estado y será administrado exclusivamente por las organizaciones sociales", precisó.
El Plan gubernamental 2010-2015 propone la construcción de una red de aeropuertos en las ciudades que cuentan con potencial turístico. Para ello se implementarán planes intersectoriales, con prefecturas y municipios, y se crearán, a su vez, redes eficientes de servicios para atraer al turismo interno y externo.
Entre esas regiones sobresalen Copacabana (La Paz), Puerto Rico (Pando), Guayaramerín (Beni), Rurrenabaque (Beni), San Ignacio de Velasco (Santa Cruz), Uyuni (Potosí) y Camiri (Santa Cruz).
"El complejo permitirá ofrecer principalmente servicios de hospedaje, alimentación y de esparcimiento", indicó Cahuaya.
Hasta la fecha, el Ejecutivo concluyó un programa elaborado en coordinación con la Federación de Campesinos Agroecológicos de Rurrenabaque (Beni). El complejo turístico que se construirá en esa zona beniana demandará una inversión preliminar de 500