En un auto, al que tuvo acceso Efe ayer, el juez Francisco de Borja Villena justifica la necesidad de vender ya los bienes de la aerolínea del grupo Marsans por la falta de actividad de la empresa, que hace imposible que se acuerde un plan de pagos y de viabilidad.
Además, “se dispone ya desde este momento de ofertas globales para la enajenación de la mayor parte del activo”, añade el magistrado, que también sostiene que la venta ahora de los bienes “podrá ser más beneficiosa, al obtener mejor precio, que si se espera”.

Sin objeciones del nuevo propietario
Ante la falta de objeciones por parte del nuevo dueño de Marsans, Ángel de Cabo, el juez ha aceptado el plan de liquidación que presentó el 6 de julio la administración concursal de Air Comet, que alertó entonces de la necesidad de iniciar la venta de bienes porque el Juzgado de Primera Instancia número 31 de Madrid había ordenado desalojar la sede de la empresa en Madrid, donde se ubica buena parte del mobiliario.
La administración concursal de Air Comet, formada por el abogado Mariano Hernández, el economista Luis Arqued y la Agencia Tributaria, celebrará la subasta de los activos el próximo 27 de septiembre en Madrid con el objetivo de recaudar 5,4 millones de euros, el 1,5 % de las deudas con sus 24.907 acreedores (el 92,8 % viajeros), tal y como informó HOSTELTUR en “Air Comet venderá sus bienes en septiembre“.
La mayor parte de los ingresos que se espera obtener proceden de los importes que la aerolínea todavía no ha conseguido cobrar de 44 clientes, que ascienden a 3,95 millones.
A ello hay que sumar las cantidades litigiosas que se han reclamado ya por la vía judicial a otras 33 empresas (la mayoría agencias de viajes), que totalizan 841.187,55 euros, y que se espera colocar a empresas especializadas en estos procesos.

Menos dinero para saldar deudas
La cantidad que esperaba obtener la administración concursal de Air Comet para saldar deudas se ha reducido considerablemente porque el Juzgado de Primera Instancia número 3 de Madrid rechazó en marzo que la aerolínea se quedara con la posible indemnización que tendría que pagar el Gobierno argentino por la expropiación al grupo Marsans de Aerolíneas Argentinas.
La administración concursal, que ha recurrido la sentencia, calculaba que esa reclamación podría generar unos 66 millones de euros, por debajo de las estimaciones de los antiguos propietarios del grupo Marsans, Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual, que fueron los que prometieron pagar a los acreedores de la aerolínea con el dinero de la expropiación.
En cualquier caso, la administración concursal mantiene la esperanza de cobrar los 20,66 millones de euros que reclama a Aerolíneas Argentinas, que se niega a pagar esa cantidad, lo que le ha llevado a enfrentarse a una petición de concurso de acreedores.
Con su liquidación, Air Comet se suma al destino seguido por otras compañías del grupo turístico Marsans, como Viajes Marsans, Viajes Crisol, Tiempo Libre y Rural Tours, que tampoco tienen bienes para pagar a sus acreedores.
Tanto los antiguos propietarios del conglomerado, Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual, como los nuevos dueños se enfrentan al embargo cautelar de sus bienes para hacer frente al agujero patrimonial de todas esas sociedades.