Francia no ha esperado a que finalicen las obras en la línea de alta velocidad española Barcelona-Figueres para lanzar a sus trenes hacia España, de tal manera que desde este 19 de diciembre, dos trenes diarios unirán en cada sentido Figueres y París en unas cinco horas y media.
La conexión con España a través del corredor mediterráneo va a ser una realidad en 2012 y, a través del País Vasco, se prevé para el año 2020.
Por parte gala, esta conexión constituye una de sus prioridade ya que está empeñada en diversificar sus conexiones transfronterizas.
La conclusión de la línea del Este, Estrasburgo-Alemania; la nueva línea Rin-Ródano dirigida hacia Suiza y Alemania; la conexión transalpina Lyon-Turín y la línea entre Marsella y Niza –ramal del arco mediterráneo– son parte de un programa que prevé doblar la actual red de alta velocidad, hasta los 4.000 kilómetros, de aquí al 2020.
Alemania continúa siendo para Francia la primera prioridad en alta velocidad ferroviaria.
Ahora, esta nueva línea de alta velocidad tendrá la singularidad de combinar la circulación de trenes de pasajeros y trenes de mercancías, algo fundamental para conectar de manera directa las áreas industriales y portuarias de Barcelona y Valencia con el coraz&oacut