Ser gordo cuesta caro
La tercera aerolínea estadounidense, United Airlines, ha decidido cobrar el doble a los clientes con problemas de obesidad, debido a que el pasado año recibieron 700 quejas de usuarios que protestaron por tener que compartir su espacio con personas voluminosas.
Los usuarios que presenten problemas de sobrepeso deben comprar, desde ayer, dos asientos para viajar en la clase turista cuando el avión vaya completo. Esta decisión afectará económicamente al 30 por ciento de la población adulta del país y al 16 por ciento de los niños, según el Centro de Prevención y Control de Enfermedades de ese país.
La compañía no ha detallado quiénes serán los encargados de aplicar la nueva política, pero en el aeropuerto O'Hare, en Chicago, ha trascendido que los empleados de taquilla y la tripulación recibieron instrucciones de vigilar que el tamaño de los pasajeros se ajuste a los parámetros comentados.
Según ha publicado el dairio español El País, anteriormente, compañías como US Airways, Continental Airlines o Southwest Airlines adoptaron medidas que regulaban cuándo un pasajero debía comprar un segundo billete en caso de necesitar m&aacu