La compañía aérea francesa Air France pone en marcha a partir de mañana su nuevo programa para intentar reducir costos y aumentar la ocupación de sus vuelos de corta y media distancia, lo que se traducirá, entre otras cosas, por el paso de tres a dos clases.
La Nueva Oferta Europea (NEO), con la que Air France pretende hacer frente a la competencia de las aerolíneas de bajo costo, supondrá reducciones de precios de hasta el 20% o el 30% en algunos destinos, aunque en otros las tarifas se mantendrán estables, publicó hoy "La Tribune".
Las dos clases que van a subsistir, Premium y Voyageur, van a ver reducidas algunas de sus prestaciones, y así se dejará de proponer a los beneficiarios de la primera la copa de champán de bienvenida, mientras a los segundos se les suprimirán los sandwich en los trayectos de menos de una hora y tres cuartos. A cambio de un billete más barato, el pasajero tendrá que pagar por diversos servicios, como los 50 euros que le costará mantener la posibilidad de modificar su billete o los 50 por facturar una segunda maleta.
Se trata de una ofensiva dirigida en particular a la clientela de las pequeñas y medianas empresas, muchas de las cuales debido a su bajo volumen de viajes no se beneficiaban de tarifas negociadas con Air France y en parte han abandonado la compañía de bandera francesa por otras de bajo costo. El objetivo de NEO es conseguir un impacto positivo sobre el resultado neto de explotación (EBIT) en el ejercicio que se inicia el próximo 1 de abril, y 450 millones en el siguiente.
Eso teniendo en cuenta que algunos analistas estiman que las pérdidas de explotación de Air France-KLM en sus líneas de corta y media distancia en el ejercicio que finaliza el día 31 se acerca a los 450 millones de euros, según "La Tribune".