Desde la aerolínea de bandera informaron haber acaparado el 79,7% del mercado de cabotaje en febrero.
El crecimiento se dio fundamental por un fuerte aumento en la oferta de asientos, la prohibición para que las otras empresas, como LAN Argentina por ejemplo, sumen aviones y una agresiva campaña publicitaria y de precios tendiente a robarle tráfico a los micros.
El objetivo adelantado es transportar durante el 2013 unos 8,3 millones de pasajeros los que serian exhibidos como un logro de gestión. Claro que, al revés de cualquier aerolínea, aquí no importa la rentabilidad del vuelo por lo que al mismo tiempo que crecen los pasajeros transportados sube también el rojo de la compañía.
Aunque, como dice el dicho popular “quien avisa no traiciona”, Mariano Recalde, presidente de Aerolíneas ya le había adelantado a periodistas españoles que para Aerolíneas “la búsqueda de una rentabilidad económica está en un segundo plano, ya que dentro de las prioridades del Gobierno está por delante el mantenimiento de los puestos de trabajo y los salarios, y facilitar a todos los argentinos la conectividad con el resto de provincias y países”.
Por lo pronto una ampliación del crédito otorgado por el BNDS para la compra de los Embraer permitiría sumar dos nuevos equipos -la intención original eran cuatro- a la flota de Austral lo que supone un nuevo incremento de oferta tanto en vuelos de cabotaje como regional.

Autor: Aviación News