Si uno camina por las zonas turísticas y otros barrios céntricos de la Ciudad de Buenos Aires, se dará cuenta de que cada vez hay más departamentos privados para recibir a los turistas, aunque no todos cumplen con las normativas impositivas. En los últimos años, se ha disparado un boom que no se detiene, debido también al gran flujo de viajeros del exterior que arribó a nuestro país en la última década.

Al respecto, tanta expansión del turismo y la hotelería exigieron un aggiornamiento a los nuevos tiempos signados por la creciente oferta de alojamientos no tradicionales.
En efecto, y sin ser un tema nuevo para el turismo en el país -no por eso deja de resultar urticante para los hoteleros de la Argentina-, la competencia desleal continúa desvelando a los empresarios, quienes celebran –aunque con recelos- la nueva reglamentación que dará batalla a esta modalidad informal.

Puesta a punto
“Queremos proteger la seguridad y derechos del turista. La oferta de alojamiento no tradicional viene creciendo desde la crisis del 2001”, manifestó el presidente del Ente de Turismo de la Ciudad de Buenos Aires, Fernando de Andreis, luego de presentar la reglamentación de la Ley N° 4632, de Registración de Propiedades de Alquiler Temporario Turístico, sancionada en junio pasado y aprobada por la Legislatura en julio de 2013.
Además, el funcionario remarcó que “se requirió de un marco regulatorio que de tranquilidad a los turistas, pero que también cuide a los propietarios”.
Junto de Andreis estuvieron presentes; y Gastón Casoy y Daniel Manzella, Presidente y Vicepresidente, de la Asociación de Hoteles de Turismo de la Ciudad de Buenos Aires.
“Con estas decisiones seguimos avanzando en hacer de Buenos Aires un lugar seguro y confiable, tanto para quienes nos visitan, como para quienes se esfuerzan todos los días por ofrecer el mejor hospedaje. Vamos a seguir trabajando, acompañando a quienes hacen de Buenos Aires, la ciudad de todos los argentinos y uno de los principales destinos del mundo”, agregó el titular del Ente de Turismo porteño; quien estuvo acompañado de Graciela Fresno y Leonardo Baguette, presidente y vice - presidente de la Asociación de Hoteles, Restaurants, Confiterías y Cafés, durante la presentación.

Mientras tanto, en el primer mundo
La preocupación por los alojamientos informales no es sólo argenta y este debate también se suscita al lado del charco. En efecto, y gracias al vacío legal existente, en la actualidad portales como Airbnb, Windu o Alterkeys operan sin problemas y se escudan no sólo en qué la obligación de cumplir la ley es asunto de los anfitriones, sino además en qué su modelo es un respaldo laboral para muchas familias y que dinamiza la economía de los barrios.
Al respecto, el presidente de la Asociación Empresarial Hotelera de Madrid (AEHM), Antonio Gil, exigió una normativa exigente para Madrid. Teniendo conocimiento de muchas casas y departamentos adquiridas por inversores para vender sus habitaciones, el empresario exhortó “a la Comunidad de Madrid que de forma definitiva y urgente legisle sobre esta actividad y persiga la ilegalidad ya que, lo contrario, sería dar carta de naturaleza al vale todo”. Para finalizar el dirigente español dijo “el Gobierno regional debe decidir si apoya al sector del que depende casi un 10% del PIB o a los avispados inversores que ven en las viviendas para uso turístico la posibilidad de explotar un hotel sin las exigencias que tienen estos establecimientos”.
En esta línea, a pocos kilómetros de allí, el organismo que agrupa a las principales asociaciones hoteleras, de restauración y turísticas de Cataluña, destaca la falta de seguridad, la precarización del trabajo o la poca responsabilidad a la hora de pagar impuestos como los prejuicios principales de esta modalidad.
Por su parte, y un paso adelantado aunque controversial Ámsterdam aprobó una normativa que posibilita el alquiler de alojamientos privados por cortos periodos de tiempo cumpliendo una serie de condiciones, entre las que destaca el pago de una tasa turística por parte del arrendador y la contratación no puede superar los dos meses y ser cuatro los ocupantes. La noticia, que  ha sido recibida muy positivamente por las webs especializadas en el alquiler vacacional, también resultó bien vista por los empresarios hoteleros.

Números que no dejan dudas
De acuerdo a información del Ente de Turismo, se estima que hay alrededor de 60.000 camas hoteleras y unas 20.000 camas en departamentos de alquiler temporario; al tiempo, que se cree que unos 51 edificios fueron construidos especialmente para ofrecer este tipo de alojamiento.
Por su parte, cerca del 98% de la oferta de alquileres temporarios es realizada a través de intermediarios, siendo estos en su gran mayoría inmobiliarias o agencias que ofrecen el servicio mediante Internet y/o diversos medios gráficos.
Cabe destacar, que estas agencias, además, suelen brindar de manera adicional servicios turísticos, como clases de idiomas y tango, traslados, city tours, etc. Es decir que se manejan como una agencia de turismo formal.

Números que no dejan dudas
De acuerdo a información del Ente de Turismo, se estima que hay alrededor de 60.000 camas hoteleras y unas 20.000 camas en departamentos de alquiler temporario; al tiempo, que se cree que unos 51 edificios fueron construidos especialmente para ofrecer este tipo de alojamiento.
Por su parte, cerca del 98% de la oferta de alquileres temporarios es realizada a través de intermediarios, siendo estos en su gran mayoría inmobiliarias o agencias que ofrecen el servicio mediante Internet y/o diversos medios gráficos.
Cabe destacar, que estas agencias, además, suelen brindar de manera adicional servicios turísticos, como clases de idiomas y tango, traslados, city tours, etc. Es decir que se manejan como una agencia de turismo formal.