Operativo pago de sueldos: lanzaron créditos para pymes
Ante la preocupante situación de muchas pequeñas empresas, el Gobierno implementó una nueva línea de préstamos con una tasa anual de 24%.
La completa parálisis de la actividad económica a raíz de la cuarentena obligatoria que decretó Alberto Fernández está causando estragos en las finanzas de todas las empresas, en especial de las pymes. Conscientes de esta situación, en el Gobierno nacional están preocupados por el pago de salarios de marzo y abril, y buscan implementar medidas para que las compañías tengan efectivo en caja para abonarles a sus empleados. Por eso, el Banco Central realizó ayer una modificación en la Comunicación A 6937 del 19 de marzo para extenderles los incentivos a los bancos que brinden créditos a una tasa anual no superior al 24% durante 180 días.
De esta manera, mediante la Comunicación A 6946, la entidad monetaria flexibilizará los requisitos de los encajes y habilitará a poseer una mayor cantidad de Leliq de la permitida a las entidades que financien el pago de sueldos a las pymes argentinas.
"Lanzamos una línea de crédito que va a permitir a las pymes financiar la totalidad del pago de los salarios de abril a una tasa del 24% por el plazo de un año. Cuidamos el trabajo y la producción nacional con un Estado presente", anunció Matías Kulfas, ministro de Desarrollo Productivo de la Nación, en su cuenta de Twitter.
La medida se suma al decreto firmado hace unos días por el presidente de la Nación para prohibir las multas y suspensiones de cuentas bancarias por cheques sin fondos. Más allá de todo, miles de compañías argentinas tuvieron muchos problemas durante la jornada de ayer tras la reapertura del clearing bancario, que generó una ola de cheques de pago diferido rechazados. Claro, en un mes de facturación prácticamente nula, son muy pocas las firmas que pudieron hacer frente a los compromisos adquiridos tiempo atrás con sus proveedores. En medio de todo esto, y con las novedades impulsadas por el BCRA, los pequeños empresarios hacen malabares en una carrera contra el reloj para poder cumplir con los haberes de sus empleados.