El desafío de comercializar uno de los destinos más visitados
Hasta 2019 llegaban a Italia alrededor de 60 millones de turistas por año y ahora está empezando a recuperar esas cifras. Operadores explican cómo operan en el territorio.
Italia es desde hace varios años uno de los primeros países europeos elegidos para visitar. Entre las ciudades más concurridas se encuentran Roma, Florencia, Venecia y Milán.
En este marco, la semana pasada se conoció que Venecia comenzará a cobrar una tasa de ingreso a los turistas que arriben al destino a partir del 16 de enero de 2024. Asimismo, previamente deberán inscribirse en un registro.
Esta medida surge luego de la masificación que está atravesando la ciudad y que está provocando malestar entre sus visitantes, que no ven con buenos ojos la cantidad de pasajeros que circulan día a día. Para conocer cuál es la situación, Mensajero dialogó con operadores y un receptivo en el destino, quienes dieron su visión del escenario que vive Venecia actualmente.
LA OPINIÓN DEL TRADE SOBRE LA SITUACIÓN EN VENECIA
Chiara Gigliotti, general manager de Carrani Tours, receptivo en el destino, manifestó complicaciones para la reserva del alojamiento e incluso para las principales atracciones turísticas, como el coliseo romano, la Basílica de San Marcos o las lanchas y góndolas a motor.
Desde 2021, el país prohíbe a los grandes cruceros la estancia en la laguna de Venecia, y se impusieron medidas en Roma para restringir el acceso a la Fontana de Trevi y a la Plaza de España.
Por su parte, en Portofino, una de las ciudades costeras más elegidas de la Riviera italiana, el gobierno local lanzó una legislación para evitar que los turistas se demoraran tomándose selfies. Aquellos que infrinjan esta ley deberán pagar multas de hasta 275 euros.
Otra de las complicaciones se trata en la búsqueda de un hospedaje. En este sentido, Gigliotti explicó que ante tanta cantidad de turistas, el contratar un servicio de hotelería se vuelve cuesta arriba dado que los hoteles que quedan disponibles exceden el presupuesto de la mayoría de los pasajeros.
Incluso Vanesa Crupnicoff, CEO de Vietur, describió que hace años los alojamientos que incluyen en sus salidas están ubicados fuera de la ciudad y que por eso cuentan con un servicio de traslado ida y vuelta que acompaña a los viajeros.
Un punto a tener en cuenta es que desde junio, Florencia prohíbe nuevos alquileres turísticos en su centro histórico, sitio protegido por la Unesco. En este contexto, muchos habitantes nacidos allí decidieron migrar hacia otras localidades para escapar del ruido extremo, el tráfico y la contaminación que se genera por el turismo.
Pero, más allá del aumento en el país, la situación escala a nivel del continente entero. Al respecto, Carla Tártara, CEO de Organización Piamonte, considera que debido a la guerra en la que se encuentra Rusia, se produce un flujo de turistas de los países orientales a los destinos europeos.
Desde la Organización Mundial de Turismo se predice que, para fines de esta década, el flujo de viajeros internacionales superará la cifra de dos mil millones.