Las jornadas contaron con la participación de la subsecretaria de Desarrollo Turístico del ministerio de Turismo de la Nación, Valeria Pellizza; el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza; el presidente de la República de el Salvador, Mauricio Funes; el secretario general de la Organización Mundial del Turismo (OMT), Taleb Rifai; y representantes de los organismos nacionales de Turismo de Ecuador, Méjico, Paraguay, Uruguay, Brasil y Chile.
Con el objetivo de posicionar el foro como un espacio para el dialogo y la formulación de políticas turísticas en América, se desarrollaron plenarios que abordaron importantes temáticas centradas en el Turismo como desafío a la pobreza.
El Secretario General de la OMT realizó adelantos de las perspectivas del Turismo para los próximos años -con la actualización del documento de Turismo 2020, que actualmente se proyecta hacia el año 2030- en las que se consideran las temáticas de Seguridad, Accesibilidad e Indicadores de Competitividad para el crecimiento de la industria turística.
También se hizo énfasis en la importancia de la diversificación de la oferta, especialmente en áreas rurales en contraposición de lo urbano, con el fin de desarrollar capacidades para promover las inversiones locales y la generación de empleo.
Durante el cierre del Congreso se comunicaron algunas premisas para abordar la actualidad turística mundial, a partir de que las naciones puedan desarrollar capacidades y habilidades para contribuir a disminuir la pobreza. Este desafío se postuló a través de la alianza estratégica de los sectores público y privado con la participación de las comunidades locales, para brindar beneficios a los estratos más vulnerables de