El titular de Aerolíneas, Mariano Recalde, estimó que para mediados de febrero comenzarían las operaciones con los Airbus, que posee capacidad para 295 pasajeros; mientras que el Boeing con capacidad para 175.
Esta incorporación es parte del plan de renovación de flota anunciada en el plan de negocios de Aerolíneas cuando el Estado recuperó la línea de bandera y que, a partir del enfrentamiento con los gremios, la empresa decidió adelantar.
Recalde aclaró que los aviones que se devolvieron son los que tenían el contrato vencido, y para los que no “se llegó a un acuerdo con sus fabricantes”. “Existe resistencia por parte de los pilotos de los Jumbo a que se den de baja para comenzar a utilizar los Airbus. Los Jumbo son utilizados hoy sólo para viajar a Madrid. Sus pilotos vuelan a destino, descansan casi una semana y luego regresan. Esta es la única actividad mensual, lo que genera un déficit importante para la firma aerocomercial, debido a que esas unidades no ofrecen otro servicio, al igual que la tripulación”, detalló el titular de la aerolínea.
Asimismo incluye una reinterpretación de la normativa sobre las horas de servicio y tiempo de vencimiento del personal de vuelo: los pilotos computan su tiempo de servicio desde que salen de sus hogares hasta que arriban al mismo. Ese beneficio, se anunció, se eliminaría, como así también el tiempo de espera para dar el servicio.