Podría o no catalogarse como una bomba, pero lo que sí ha causado en muchos comerciantes es estupefacción, por lo menos en estas primeras horas y días, donde hay más incertidumbres que certezas. Lo ocurrido: a raíz de la resolución 51-E/2017, la Secretaría de Comercio confirmó que, a partir del 1 de febrero, los negocios deben cobrar el mismo precio en efectivo, con débito y con crédito en un pago. Pero eso no es todo, ya que también ordenó que al ofrecer cuotas, deben informar los costos financieros. La frutilla del postre: ya no podrán incluir la frase “sin interés”. Bon appetit.
Según explicó Miguel Braun, titular del área en cuestión: “Apuntamos a que sea transparente el precio de las cosas y del financiamiento”. Concedió, además, que el nuevo sistema traerá “más competencia de precios y más competencia entre los Bancos y las tarjetas por el financiamiento”. 
Como se dijo, el cambio producto de la implementación “Precios Transparentes” sorprendió a varios. Fueron muchos los comerciantes que no sabían por dónde encarar, mucho menos cómo responder. Algunos optaron por sólo dejar los precios de contado en los estantes o marquesinas y agregaron la leyenda “consultar por financiación”. Hubo otros que suspendieron promociones bancarias, mientras que hay comercios que siguieron cobrando como antes.
Hay que admitirlo, aunque algo se logró, todavía falta. Las rebajas en los precios de contado, si las hubo, no alcanzaron el 20 por ciento, monto al que aspira el Gobierno. Otra tendencia que se registró: leves aumentos en los precios. La gran diferencia para el consumidor es que ahora, al usar la tarjeta de crédito, los pagos ya no se calculan dividiendo el precio de lista por la cantidad de cuotas (por ejemplo, 12). Lo que ahora se divide por el número de meses es el precio de contado más un recargo por la financiación que crece cuanto mayor es el plazo requerido. “El que suba los precios seguramente va a tener menos ventas”, advirtió Braun, al tiempo que amplió: “Vamos a volver a un escenario más competitivo, como el que vivimos entre 2003 y 2008 donde muchos comercios tenían un descuento con unas tarjetas, pero no con todas”

En los hechos
Ahora bien, explicado cuál es el contenido y el fin de Precio Transparentes la pregunta es: ¿cómo se adecuó la industria turística al sistema? A días de la implementación, lo que primó fue la incertidumbre. “No está muy en claro qué vamos hacer”, arriesgó un vendedor de una agencia de viajes céntrica. Y al igual que él,  este semanario pudo constatar que son varios los establecimientos que ponen en duda su accionar. 
“Nosotros vamos a seguir trabajando de esta manera, con cuotas financiadas”, afirmó otro agente, al ser consultado por este medio. “Aunque no sabés lo que pasará más adelante”, conjeturó. Esa falta de certeza también se vio reflejada en muchas vidrieras, puesto que los precios seguían figurando sin ningún tipo de aclaración, al igual que las cuotas sin interés, por ejemplo. 

Importante
Desde la Secretaría de Comercio afirmaron que las compras financiadas más baratas serán las que se enmarquen dentro del plan “Ahora 12” y “Ahora 18”, que llevará un costo financiero del 27 por ciento y 30 por ciento, respectivamente. Y aclararon que ambos planes llevan una parte de su costo subsidiado: los bancos no mueven la tasa y a cambio el Banco Central les reduce el encaje bancario.
La mirada dirigencial
De acuerdo a Fabricio Di Giambattista, titular de FAEVyT, los costos ya estaban, pero lo que hay que hacer ahora es informarlos. “Antes era pagado por el consumidor o absorbido por el comerciante”, explicó, “la diferencia ahora es que hay que exhibir quién se hace cargo, hay que mostrarlo”.
La dificultad que trae aparejada para la actividad, manifestó, pasa por la multiplicidad de productos que brindan, como así también los tipos de financiación que poseen, como la del prestador, o la de las agencias mismas, ejemplificó. “Vos debes informar cada una de las alícuotas, adaptar los sistemas para las promociones, para las publicaciones y eso genera conflictos a la hora de las exhibiciones de precios, porque se es plausible de multa si no se hace correctamente. Hay que readaptar todo este nuevo reordenamiento”. Y expresó: “Seguramente, para una casa de electrodomésticos es mucho más sencillo que para nosotros, por el tipo de producto que comercializan”.  
Por otra parte, sostuvo que es una medida positiva, ya que intenta transparentar algunos costos, pero no sólo a nivel turístico, sino que en general. Sin embargo, admitió que la implementación es bastante engorrosa, y más si se tiene en cuenta las multas previstas, que para las agencias pueden resultar “bastantes excesivas”.
No obstante, agregó que “la necesidad de vender en cuotas existe, y es falso eso de que hay una distorsión o que los precios aumentan y demás. Debido a la inflación, era una herramienta que permitía la comercialización de muchos productos, sobre todo los turísticos, que son bastante caros, como los aéreos”. Y ccontinuó: “Son herramientas de ventas. Estas disposiciones siempre tardan en adaptarse e implementarse correctamente y tener las debidas interpretaciones de lo que se pretende por parte del Estado y al mismo lo que se puede y debe hacer por parte de los involucrados”.

Los operadores andan diciendo...
Para Rodolfo Bor, presidente de Opciones Argentinas, la intención del Gobierno es buena. Y justificó: “Había una publicidad y una promoción en algunos casos engañosa, porque no estaban clarificados los verdaderos y reales costos de lo que el pasajero terminaba comprando y, después, terminaba pagando”. Servirá, aseveró, para que aquel que contrate un servicio con un plan de pago con tarjeta de crédito pueda saber cuál es el verdadero y real costo.
Asimismo, no considera que la implementación de la medida vaya a producir una baja en los precios. “A nosotros mayormente no nos afectó porque siempre vendimos con el slogan de ‘cuotas fijas’”. En el caso de Opciones, desarrolló, cuentan con muchos planes de pago con tarjetas de crédito propios, en los que se aclara que existe algún tipo de costo, para no tratar de distorsionar algún costo que en un principio no estaba a la vista.
Volviendo sobre una eventual baja de precios, Bor asumió que en turismo no cree que ocurra –a diferencia de otros rubros-, porque los márgenes de comercialización son muy bajos. Lo que ocurrirá, asumió, será una clarificación, una transparencia entre el pago contado y el financiado. En lo que respecta a su compañía, expresó: “Sólo hubo que agregar a nuestra comercialización la tasa efectiva anual y el costo financiero total”.
Al igual que Opciones Argentinas, en SIGA Turismo no hubo modificaciones significativas en materia de precios. Ni subieron ni bajaron. En palabras de Javier Araya, director de la firma: “Esta transparencia nos permite decir ‘este es realmente el precio y esto es realmente lo que cuesta la financiación con la tarjeta a través del banco que corresponda’”. Y aseguró: “Nunca mejor utilizada la palabra transparencia”.
También explicó: “En la modalidad de trabajo anterior, generalmente las tarjetas o los bancos te obligaban a poner que la financiación era sin interés, cuando en realidad esa financiación sí tenía un costo asumido por los comercios, que en el caso nuestro, por los márgenes del rubro, no los podíamos absorber”. Por otro lado, contó que poseen acuerdo de financiamiento, de cuotas sin interés. “Son acuerdos que ya teníamos, y casualmente en el último mes, dos de los principales acuerdos de cuotas sin interés, uno de 12 y otro de 6, se han renovado, o sea, que van a seguir. No hay posibilidad de que cambien”.
Hasta el momento, explicó Laura Kurtz, Gerente Comercial de Solways, “nuestro equipo está recabando información con las entidades bancarias”. Muchas, reconoció, aún no se han pronunciado al respecto, salvo dos, que “nos han dicho han caducado los acuerdo y que nos informarían sobre las nuevas decisiones con los coeficientes”.
Comentó, además, que la operadora continua trabajando de la misma manera, por lo menos con las que aún no se expresaron ni modificaron nada. “Después seguimos normal, con la operatoria de todas las financiaciones que ofrecen las compañías aéreas, porque ellos tampoco han modificado absolutamente nada. Hay una gran nebulosa”, sintetizó y dijo que están esperando novedades.
A la hora de hablar sobre el impacto que esta medida podría llegar a tener, Kurtz aclaró que “hoy los viajes se sustentaban en la financiación, la cual es importante que no se corte”. Y definió que el pasajero lo que busca son cuotas, por más que tengan intereses, lo pagaba. Y finalizó: “La realidad es que para el bolsillo del argentino medio, pagar un viaje en efectivo, es imposible”.   

Sin cambios
En diálogo con este medio, el economista Pablo Singerman brindó su visión al respecto del plan Precios Transparentes. “En general, todo lo que tenía que ver con tarifas en cuotas, estaba vinculado a un negocio financiero por parte de los bancos. Pero por otro lado, también poseía algo positivo para los comercios en general, porque cuando vos vendías en una sola cuota con tarjeta, los bancos te acreditaban ese dinero a los 30 días aproximadamente, mientras que cuando lo hacían en cuotas, las entidades bancarias le acreditaban a las 48 o 72 horas, dependiendo la empresa”, planteó.
“Con respecto al tema turismo”, esbozó, “creo que esto puede llegar a significar un cimbronazo, ya que se abre lo que significaba la financiación, el costo mismo, el interés que antes lo podía absorber, por ejemplo, las compañías aéreas y ahora hay que ver cómo va a reaccionar el mercado”.
Por último, sostuvo que hasta el momento no ha habido grandes cambios. Y sugirió: “En estos días habrá que hacer un seguimiento, para ver cómo reaccionarán las compañías aéreas, los mayoristas y los bancos”.