Según el informe de Singerman & Makón, "casi la mitad de los encuestados manifestó un ánimo mayor de realizar un viaje a partir del aislamiento social".

Entre el 8 y el 24 de abril, el Estudio Singerman & Makón realizó un relevamiento que contó con el apoyo de la plataforma CoLABtur y que tuvo como objetivo identificar tendencias sobre las expectativas de consumo para la etapa post crisis de la pandemia COVID-19 en Argentina. Los resultados fueron nucleados en el documento al que denominaron “Posibles Escenarios del Consumo y del Turismo Post Coronavirus”. En la encuesta se analizaron 609 casos de los cuales un 52% tienen entre 18 y 29; y un 37% entre 30 y 59. Más de la mitad del total poseen estudios universitarios y un 43% de todos los consultados son empleados", explica el informe.

En el inicio hace un repaso por la situación económica general. Por ejemplo, observa que la mitad de los encuestados sostuvo que la crisis generada por la pandemia ha disminuido su nivel de ingresos, mientras que para un 39,4% se ha mantenido en los mismos niveles previo a la crisis. Esto ha llevado a que se produzcan dos fenómenos bien diferentes en cuanto a los niveles de ahorro. Por un lado, un 51,6% afirmó que ha decrecido ante el evidente deterioro de los ingresos; y por el otro, un 19% ha manifestado un mayor nivel, producto de que algunos de sus gastos han disminuido por efecto de la cuarentena.

Luego, el documento indica que "los viajes y el turismo se posicionan como la actividad prioritaria dentro de las expectativas de consumo de las personas encuestadas, con los ahorros disponibles, para la etapa posterior a la cuarentena y se reabran los destinos turísticos".
"Viajes y turismo primeros en las expectativas de consumo"

A pesar de estos datos, el informe indica que el miedo puede ser el principal obstáculo para la reactivación de la industria. El temor al contagio es el principal factor que podría afectar la próxima decisión de viajes y turismo, siendo la principal amenaza que atenta contra el sector; seguido por pérdida de poder adquisitivo o incertidumbre personal que afecta la planificación. 

Por otro lado, resalta que casi el 55% desearía realizar un viaje de entre 3 y 12 meses una vez reabiertos los destinos. "Aunque dos de cada tres encuestados no tendría planeado llevar adelante un viaje en el próximo trimestre, aunque la cuarentena se levantara en una semana", remarca.

En este sentido, hacen hincapié en que las medidas de seguridad sanitaria en los destinos pasaron a ser consideradas como los incentivos prioritarios, como determinante de los viajes y el turismo.

"El 73,6% de los encuestados pondera altamente la relevancia de la seguridad sanitaria. Aún por sobre variables tradicionales como precios en destino, costos del transporte y calidad del servicio", concluye.