Dicen que la venta es una actitud y un estado de ánimo. Por eso los operadores se empeñan en realizar capacitaciones en almuerzos y desayunos para agentes de viajes en lujosos hoteles. Pero uno de ellos, al ser consultado por la efectividad de éstas, lanzó: “Qué se yo. Hacemos lo que podemos. Algunos son impresentables. Venden productos de alta gama pero vienen sin corbata, despeinados y otros ni se lavan la cara, los saludás y te quedás pegado. Pero acá no enseñamos modales, lamentablemente”. 
Es como dice Charly García: “no existe una escuela que enseñe a vivir”

Es increíble como el frío reinante en gran parte del país está calentando los ánimos de los empresarios turísticos vernáculos. Y no precisamente porque se calefaccionen en demasía (como deslizó algún funcionario) sino por las facturas de luz y gas que resultan practicamente impagables. Así lo contaba uno de los damnificados durante la última semana:
- En mi hotel pasé de pagar 6500 pesos de luz a más de 20 mil, ¿me querés decir cómo hago para hacerle frente? Si aplico el mismo aumento a mi tarifa nunca más entra un pasajero pero si no aumento me cortan la luz!! Estoy a un paso de cerrar todo y dedicarme a otra cosa. No doy más!! , se descargó.  
Parece que ni el Chapulín Colorado podrá salvarlo... 

Una pasajera de origen chino se acerca al mostrador de una agencia de viajes para solicitar una excursión. De manera acelerada, los dos empleados se debaten quién la atenderá, ya que no saben mucho inglés. Uno logra esbozar algunas palabras de recibimiento, cuando la mujer lo detiene y le dice: “no te molestes, vivo hace 15 años acá, vengo a averiguar algo para mi mamá que vino de visita”. 
Claro, hay que esperar a que la otra persona hable, muchachos.

La temporada de invierno se acerca y ya comenzaron a aparecer notas en los diarios que hablan de lo caro que saldrá esquiar este año en Argentina. Tan escandalosos son los números que hasta se hicieron eco en los noticieros televisivos, pero, ¿acaso es para tanto? ¿Cuántos son los esquiadores activos que tiene nuestro país (sin contar los pobladores de las localidades donde están los centros de deportes invernales)? 
Si hasta los propios operadores especializados saben que el volumen de los verdaderos esquiadores se mantiene casi sin variantes desde hace tiempo, e incluso son los que suelen aprovechar la contraestación del hemisferio norte para visitar los centros de Vail, Aspen o Colorado durante nuestro verano, con lo cual lo caro o lo barato es relativo.  ¿A quién benefician entonces las notas catástrofe? 
Qué buena pregunta Macaya!!</div