Andes consolida en Argentina su modelo de vuelos chárter
La aerolínea sigue adelante con su reconversión con el refuerzo de su flota y su apuesta a los viajes especiales, con foco en el turismo estudiantil y el Caribe.
El segmento de vuelos chárter en Argentina vive un momento de dinamismo, y Andes Líneas Aéreas emerge como uno de sus principales protagonistas. Luego de una pausa forzada por problemas financieros, la aerolínea de capitales nacionales vuelve a ser noticia, esta vez por una expansión orientada a los servicios especiales: viajes estudiantiles, deportivos, corporativos y turísticos.
La compañía consolidó esta semana una etapa clave de su reconversión con la incorporación de dos aeronaves Boeing 737-700, que se suman a su flota y le permiten robustecer su oferta en rutas nacionales y regionales. Con una estrategia clara y una mirada puesta en nichos de alta demanda, Andes busca recuperar protagonismo con un modelo operativo flexible y adaptado a las necesidades actuales del mercado.
Nuevos aviones, nuevas oportunidades
Los dos nuevos Boeing 737-700, de 147 plazas, llegaron desde Estados Unidos tras pasar por Guayaquil, y ya están operativos. Ambos aviones —matrículas LV-PPM y LV-ARR— se integran mediante leasing con la firma Babcock & Brown Aircraft Management (BBAM), y provienen de flotas de las aerolíneas KLM y la ya disuelta Ecuair.
Con estas incorporaciones, la flota de Andes queda compuesta por cuatro aeronaves: dos Boeing 737-800, con capacidad para 189 pasajeros, y los recién llegados 737-700. Esta combinación permite a la compañía adaptar su propuesta a distintos tipos de vuelos chárter, desde los estudiantiles y deportivos hasta traslados corporativos y turísticos.
Foco estratégico en turismo y deporte
El relanzamiento de Andes no es solo una cuestión operativa, sino también de visión de negocio. En lugar de competir en el desafiante mercado de los vuelos regulares, la empresa decidió especializarse en un segmento que le garantiza demanda concreta y contratos estables: los vuelos especiales.
Uno de sus puntos fuertes es el turismo estudiantil, una actividad en la que Andes tiene experiencia y que había comenzado incluso antes de su interrupción operativa en 2020. Aunque la ruptura con Travel Rock en 2019 fue un golpe clave en su crisis financiera, el segmento de egresados sigue siendo estratégico para la aerolínea.
Asimismo, Andes refuerza su presencia en vuelos hacia el Caribe en alianza con agencias de viajes, ofreciendo paquetes integrales que incluyen el traslado. Y en el plano deportivo, continúa siendo una opción elegida por equipos argentinos de fútbol que participan en torneos internacionales, como la Copa Libertadores o la Sudamericana.
Rutas clave y destinos de alta demanda
La expansión de flota tiene como objetivo fortalecer rutas domésticas de gran volumen turístico. Andes planea operar con mayor frecuencia hacia destinos como Bariloche, El Calafate, Cataratas del Iguazú, Mar del Plata y Córdoba, que concentran gran parte del movimiento nacional durante temporadas altas.
En el plano internacional, la compañía apuesta a seguir creciendo en rutas regionales hacia Brasil y el Caribe, con un foco particular en vuelos a demanda organizados en conjunto con turoperadores.
Más allá del turismo: corporativo y soporte a terceros
La diversificación también incluye servicios corporativos. La compañía ofrece vuelos chárter para empresas que requieren traslados para congresos, convenciones o eventos. Este tipo de servicios, menos dependientes de la estacionalidad, se convierte en una fuente estable de ingresos.
Otra línea de acción que Andes ya ha explorado es brindar apoyo operativo a otras aerolíneas. En el pasado, colaboró con Flybondi cubriendo vuelos adicionales ante picos de demanda, una posibilidad que podría repetirse a medida que se consolide su flota.
Reconversión como respuesta al nuevo escenario aéreo
La irrupción de las low cost en 2017, tras la desregulación del mercado aerocomercial argentino, representó un duro golpe para Andes. Sin respaldo financiero internacional, le resultó inviable competir en igualdad de condiciones. La salida fue cambiar de estrategia.
Hoy, lejos del modelo de vuelos regulares, la compañía apuesta por un camino más sostenible y rentable. Con inversión en flota, alianzas comerciales y foco en mercados específicos, Andes redibuja su rol dentro del ecosistema aéreo nacional. Y en ese mapa, el chárter aparece como su nuevo motor de crecimiento.