Una extensa lista de hasta 80 compañías aéreas entre las que figuran -por ejemplo- Lufthansa, British Airways, Air France y American Airlines presentaron una denuncia contra Viajes Marsans y tres filiales por “apropiación indebida” de unos cinco millones de euros que responden a las ventas de billetes que empresas del grupo realizaron en sus agencias de viajes con productos de las aerolíneas entre los días uno y 15 de abril de 2010. Las cantidades recaudadas no fueron liquidadas posteriormente en la forma establecida, lo que provocó la anulación de las licencias de venta como operador de viajes por IATA (la patronal global del sector aéreo) y, posteriormente, la interposición de esta denuncia.
Entre las compañías aéreas denunciantes se encuentran cinco españolas: Air Europa, Spanair, Binter, Vueling y la pequeña aerolínea canaria Islas. Por el contrario, el mayor transportista aéreo español, Iberia, dio instrucciones concretas para no incorporarse a la lista de las promotoras de la denuncia colectiva.
Durante el procedimiento judicial se trata de establecer “cuáles son las causas por las que la cadena de agencias ha actuado de la manera que lo ha hecho” y determinar también quiénes son “las personas responsables del presunto hecho delictivo”.