Un broche de...chocolate
Desde temprano, comenzaron a llegar residentes y turistas a la plaza del Centro Cívico para observar las últimas tareas de desarme de la carpa que albergó al huevo de pascuas durante dos semanas. El coloso de chocolate quedó por primera vez al descubierto, para recibir flashes desde todos los ángulos y que su foto dé la vuelta al globo. Bariloche, noticia alrededor del mundo.
El sábado por la noche, Bariloche había vivido un gran espectáculo musical a cargo de Axel y Miranda y luego un increíble show de fuegos artificiales que iluminaron el lago Nahuel Huapi. Y algunos días antes, el miércoles, miles de barilochenses y visitantes aplaudieron ante la medición final de la Barra de Chocolate Más Larga del Mundo, que ocupó la calle principal de la ciudad con sus 100 metros dos centímetros de largo y 40 centímetros de ancho, antes de ser trozada y repartida entre los presentes.
El tan esperado Domingo de Pascuas, el clima acompañó estupendamente la jornada con un cielo diáfano y un sol radiante que incluso colaboró en la tarea de romper el huevo. Unos minutos antes de la hora pactada para que el intendente de Bariloche, Omar Goye, diera el golpe simbólico, un trozo del huevo se desprendió, motivando el aplauso del público, como si se estuviera frente al rompimiento del glaciar Perito Moreno.
El agrimensor Anuar Aliz realizó la medición del huevo de pascuas y determinó que el mismo alcanzó los ocho metros con veintisiete centímetros de altura. Este registro junto a un informe técnico con fotos y videos en alta definición, serán enviados a Londres, sede central de Guinness, que durante esta semana dará la respuesta definitiva acerca del récord que Bariloche propone alcanzar.
Subido a la grúa de un camión, el intendente de Bariloche, Omar Goye, rompió con una piqueta la parte superior del huevo. Inmediatamente, los niños de la escuela Kailén realizaron una suelta de globos que inundaron de color el cielo. La ovación del público no se hizo esperar. La plaza del Centro Cívico ya era una fiesta.
El resto del trabajo de rotura del huevo fue realizado por miembros de Bomberos Voluntarios y Defensa Civil, quienes a fuerza de piquetas y mazazos derribaron al gigante de chocolate.
El trabajo de trozar y entregar los chocolates al público fue realizado por estudiantes de El Obrador Escuela de Arte Culinario y la Escuela de Hotelería y Gastronomía de Bariloche, cuyo aporte resultó muy importante durante todo el proceso de armado del huevo. Colaboraron además en la tarea de repartir el chocolate, miembros de las Colectividades europeas, quienes aportaron un colorido toque a esta festividad.
Mientras se procedía a romper el huevo y repartir el chocolate, en el escenario instalado en el Centro Cívico se entregaron diplomas a los maestros chocolateros de las empresas que componen la Cámara Chocolateros San Carlos de Bariloche, en reconocimiento a su esmerado trabajo para concretar el objetivo. Más tarde, el chocolatero Hugo Sosa recibió de manos del Ministro de Turismo de Río Negro, Ángel Rovira Bosch, y del intendente de Bariloche, Omar Goye, un diploma por todo el conocimiento técnico aportado. “Vivimos muchas emociones durante el armado del huevo. Es una gran alegría haber llegado hasta este día. Cuando se pensó este proyecto en el minuto cero parecía imposible, pero se logró el objetivo gracias al esfuerzo de todos. Me llevo un gran recuerdo del grupo humano que trabajo en este sueño”, dijo Hugo Sosa.
Los integrantes de la Cámara de Chocolateros agradecieron al público su presencia y acompañamiento durante toda la celebración. “Gracias Bariloche por todo lo que nos das”, expresó Diego Ferrari, integrante de la Cámara. “Esperamos que esta fiesta sea una bisagra y abra una nueva etapa para la ciudad”, remarcó Sergio Tissera. Por último, Juan Carlos Carzalo, también referente de esta entidad, agregó: “Estamos realmente exultantes, nos invade un gran sentimiento en este momento y esperamos tener el año que viene una mejor Fiesta del Chocolate”.
La Banda de la Escuela Militar de Montaña Bariloche acompañó la jornada con un variado repertorio musical, muy bien recibido por el público. El momento más alto de su presentación llegó con la interpretación del Himno Nacional Argentino, cantado por las diez mil personas presentes en la plaza bajo la bandera flameando en lo alto del mástil del Centro Cívico.
Además del chocolate, se entregaron “orejas de conejo” que los chicos y no tan chicos lucieron como recuerdo de estas inolvidables Pascuas 2012