En Mendoza se comercializan desde hace dos meses diversos paquetes turísticos exclusivos para el mercado gay. Este producto apunta a un segmento que apenas asoma en el rubro pero tiene grandes posibilidades de crecimiento según los entendidos del sector.
En mayo, la Secretaría de Turismo convirtió a la provincia en la primer región argentina interesada en promocionar el turismo gay.
En esa ocasión se firmó un convenio de cooperación con la Cámara de Comercio Gay y Lésbica de la Argentina (CGLA) con el objetivo de desarrollar planes y estrategias de promoción del turismo receptivo nacional e internacional.
En este contexto la empresa Andesmar Turismo.com lanzó Sensaciones G-Friendly, un paquete turístico pensado exclusivamente para el segmento gay.
“Este nuevo proyecto es el resultado de un largo trabajo que incluyó capacitación de nuestro personal, una comunicación permanente con nuestros proveedores (hoteles, espectáculos y bodegas) a través de la cual se pulió cada detalle de servicio y se le dio valor agregado”, dijo Jorge Spadavecchia, gerente de ventas de Andesmar Turismo.com.
La propuesta incluye una variada oferta de productos y servicios para integrantes de la comunidad, entre los cuales se destacan visitas a lugares turísticos de Mendoza, excursiones a Buenos Aires, tours por los principales atractivos turísticos del país y distintas experiencias de ecoturismo, entre otras opciones.
A la hora de señalar diferencias con un paquete turístico común, Spadavecchia destacó que el público gay es muy exigente, por lo que apuntalaron la propuesta en tres pilares: calidad, detalle y discreción.
“Nuestra idea ha sido siempre trabajar con todo el respeto por este segmento. Queremos que sea un grupo más, como el de los estudiantes, los jubilados o las familias”, señaló Spadavecchia.
“Con respecto a la calidad, ofrecemos los mejores hoteles, entre ellos el Park Hyatt, y formas de viajar. En cuanto a los detalles, hay cosas más específicas. Si a una familia se la sorprende con una canasta de frutas, a una pareja gay se le ofrece un vino de altísima calidad o un champán. Obviamente los circuitos, recorridos y actividades varían. A un grupo de jubilados no se le programan actividades nocturnas. En cambio este producto sí tiene itinerarios nocturnos u otros programas como picnics en bodegas”, profundizó Spadavecchia.
Posteriormente resumió que todo el servicio apunta a hacer sentir bien al cliente “y no tratarlo como si se tratara de un marciano”.
Spadavecchia reconoció que todavía no se trata de un segmento muy representativo en el panorama turístico provincial. Y que por ahora todas las ventas han sido nacionales (ver aparte). “Tenemos mucho público de Buenos Aires, donde el turismo gay está muy desarrollado y el movimiento de este sector se está dando de acuerdo con nuestras expectativas. Sin embargo, todavía no se ha desarrollado el sector internacional”, cerró Spadavecchia.