Una cuestión de fe
La festividad de San Juan Bautista el 24 de junio, la de San Pedro y San Pablo, el 28 y el 29 del mismo mes, y la de San Francisco Solano el 24 de julio, son en Paraguay acontecimientos que trascendieron el tiempo y que marcan la religiosidad instalada en los habitantes del país. Las expresiones de fe manifiestan una algarabía generalizada.
La fiesta de San Juan es una de las más celebradas y la que posee connotaciones más llamativas. Todas las parroquias le dedican celebraciones litúrgicas y el pueblo comparte diversiones que tienen como elemento protagónico al fuego, además de la realización de comidas típicas para compartir.
Una de las demostraciones más renombradas en las fiestas de San Juan es el caminar sobre brasas. La gente prepara una fogata y cuando la leña se convierte en brasa, se extiende sobre ella un caminero ardiente de tres o más metros de largo. Quienes lo desean se descalza y empiezan a caminar sobre los carbones encendidos sin quemarse los pies, aunque sintiendo el ardor que sube del suelo.
Otra celebración de nombre “pelota tatá” (pelota de fuego) consiste en una preparación de una pelota de trapos que se moja con querosén o gasoil y se la prende fuego. Luego, los más jóvenes, juegan con ella un partido de fútbol hasta que el combustible se haya agotado o el balón se haya consumido. También está el “toro candil” (cuernos de toro ardiendo en llamas) otro de los atractivos indispensables en esta fiesta, y el Judas Kái (la quema de algún muñeco al que se le da el nombre de Judas a manera de castigo por haber sido el apóstol que traicionó a su Maestro); por extensión esta práctica se aplica a algún personaje político que de alguna manera se hizo merecedor de la vindicta pública.
Vale decir que la Fiesta de San Juan no se agota en estos ritos, también está el Ybyrasyi (palo enjabonado o engrasado) con un premio en su extremo para quien llegue primero; desfiles de caballos, faenas taurinas, payasos y una amplia variedad de comidas típicas que se brindan solamente durante estas celebraciones.
San Pedro y San Pablo
En cuanto a la festividad de estos santos, hay una comunidad denominada Itaguazú del distrito de Altos, en el departamento de la Cordillera, que realizan el ritual de kamba ra´anga (imagen del negro) en el que los actores visten prendas hechas de hojas de banano, portan máscaras de madera y danzan al compás de la música de un grupo de nombre “banda para´i” (de colores). Esta representa una ceremonia de iniciación o es un rapto que se perpetra contra alguna doncella.
San Francisco Solano
Ya para el 24 de julio, el homenaje es para San Francisco Solano. Una comunidad de nombre Mina, en el distrito de la Emboscada, Departamento de la Cordillera, a 40 kilómetros al norte de Asunción, lleva adelante el Guaicurú ñemondé (forma de vestir de los guaicurú). Se trata de llevar la imagen de San Francisco Solano en procesión, acompañándola de devotos vestidos con pluma de aves de corral, máscaras y una banda de música con flautas e instrumentos de percusión. Esta forma deriva de la época colonial, siendo Emboscada, un pueblo formado con “pardos l