Fiesta del sol, fiesta del Cusco
Con más de 800 actores y unas 200 actividades protocolares, el Cusco se prepara para celebrar el próximo 24 de junio la Fiesta del Inti Raymi, la ceremonia religiosa andina más importante que, en la época de los incas, se hacía en honor al dios Sol. Popularmente es conocido como el Día de Cusco.
El programa que los herederos del imperio incaico han preparado para la ocasión es más que completo. Entre las actividades turísticas se puede destacar que, en la Plaza Mayor del Cusco, el 12 de junio, los niños cusqueños deslumbraron con sus danzas típicas. Por la tarde del día 13, en el Centro de Convenciones del Cusco (Plaza Regocijo) se realizó el concierto “Recuperando nuestra identidad cultural de lo ancestral a lo contemporáneo”, en honor a los 25 años de la Empresa Municipal de Festejos del Cusco – EMUFEC. Y en la noche, en la Sala Saqsaywaman de la Municipalidad Provincial, se realizó la conferencia “Cuando las piedras hablan: Arquitectura Inka y espiritualidad en los Andes”.
La degustación de platos típicos del Cusco está prevista para el viernes 15 de junio, a las diez de la mañana, donde se tuvo la oportunidad de saborear potajes exquisitos como el Chiri Uchu, el chicharrón y el cuy al horno, entre otros. Para cerrar la tarde, este mismo lugar fue el escenario del desfile de trajes típicos “Así viste mi pueblo”.
El sábado 16 de junio, iniciará con un espectacular desfile de alegorías a cargo de la Escuela de Bellas Artes. La Plazoleta del Barrio de San Blas (desde las tres de la tarde hasta la madrugada), es el espacio de la Fiesta de la Música. Al inicio del domingo 17, se realizará una caminata ecoturística por las punas de Huaccoto y con visita a la comunidad saludable (nombre de la comunidad que se ubica en Huaccoto). La noche del 20 de junio, los jóvenes, y no tan jóvenes, podrán disfrutar con el espectáculo de sonidos, luces y colores del festival de fuegos artificiales.
En la víspera se disfrutará con la Hora del Huayno Cusqueño y la Fiesta del Sol en la Plaza Mayor del Cusco. Es que la Fiesta del Sol o Inti Raymi (en quechua inti significa "sol" y raymi, "fiesta"), es un acto de gratitud por los beneficios de la madre naturaleza.
Es 24 de junio y los pututos anuncian la fiesta del Sol. La fiesta se realizará en tres escenarios distintos del Cusco. Una parte se lleva a cabo en el Qorikancha (Templo del Sol), otra en la Plaza de Armas del Cusco (el antiguo Auqaypata o Plaza del Guerrero) y finalmente, en la explanada de la fortaleza de Saqsaywaman (voz quechua "saqsay" y "waman" que significa "sáciate halcón"), a dos kilómetros de la ciudad. La población sigue el ritual con coloridos disfraces, bailan danzas costumbristas y se emocionan con los 840 actores que teatralizan la solemnidad del imperio.
La escenificación del Inti Raymi en el Qorikancha, se inicia cuando el coro de aqllas –o escogidas del Inca- recrean con cantos y danzas un homenaje que solía ofrecerse al dios Sol. La música viene de cientos de pututos, quenas y tinyas (tamborcillos). El Inca y su esposa, la Qoya, son los últimos en aparecer después del séquito real y la nobleza. La multitud aguarda expectante cada movimiento del Inca, que acompañado por el sumo sacerdote conocido como Willaq Umu, ofrece al Sol su bebida tradicional, la chicha de jora.
El cortejo religioso inmediatamente se dirige a la Plaza Huaccaypata (actual Plaza Mayor del Cusco) -ya al mediodía aproximadamente- el Inca desde la parte alta de la huaca, se dirige al dios Sol e inicia el rito de la coca. Tira las hojas y pide al sumo sacerdote que adivine la voluntad del Sol. Este, con ayuda de otro sacerdote, el Kuraq Akul, hace la lectura e informa al inca que el Sol será generoso si se sacrifica una llama.
Luego, los súbditos trasladan al Inca hasta Saqsaywaman, la fortaleza del Tahuantinsuyo. Es el inicio de una gran fiesta. Al culminar la tarde, el Inca se retira a su palacio. Como cada año, Saqsaywaman fue mudo testigo de este importante y sagrado ritual.
Concluido el Inti Raymi, el “Ombligo del Mundo” sigue celebrando con actividades diversas entre el 1 y el 8 de julio, en el que el público disfrutará de festivales de música y de gastronomía. Así es la ciudad imperial, uno de los más importantes destinos del Perú y de América, considerada Patrimonio Cultural de la Huma