Las autoridades han ordenado evacuaciones en las áreas costeras y los estados de Carolina del Norte, Maryland, Virginia, Delaware, Connecticut, Nueva Jersey y Nueva York, han declarado el estado de emergencia. También se han suspendido vuelos ante el eventual paso del ciclón por la costa atlántica de Estados Unidos.
Según los pronósticos meterológicos, "Irene" registra vientos de 185 kilómetros por hora y se perfila como uno de los más fuertes en la costa Este del país en los últimos siete años.
El fenómeno natural es por ahora un huracán de fuerza 3 en la escala Saffir-Simpson, de un máximo de cinco, y podría llegar al nivel 4 en las próximas horas. Se prevé que toque tierra el sábado, posiblemente en Carolina del Norte. Durante una rueda de prensa, el gobernador demócrata de Maryland, Martin OMalley instó a los residentes en zonas con riesgo de inundaciones a que abandonen sus hogares este fin de semana y encuentren refugio en otra parte porque se aproxima "un monstruo de huracán". "Esto es grande, es mortífero, es un huracán que se mueve lento pero se acerca al estado de Maryland", dijo OMalley tras recibir un informe de las autoridades para la gestión de servicios de emergencia.
La empresa AIR Worldwide dijo hoy que el huracán posiblemente cause mayores pérdidas económicas en las Bahamas que las que dejó el huracán "Floyd" en 1999. El ciclón ya causó la postergación indefinida de la ceremonia de inauguración del monumento al fallecido líder de los derechos civiles afroamericano Martin Luther King Jr., prevista para el próximo domingo. No se sabe aún a ciencia cierta la trayectoria del huracán "Irene", por lo que a lo largo y ancho de 1.126 kilómetros en la costa atlántica, las autoridades toman medidas de precaución.
En Nueva York, las autoridades advierten de que el ciclón podría afectar toda la zona de Manhattan. El alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, afirmó en rueda de prensa: "esperamos lo mejor, pero nos preparamos para lo peor" y anunció los planes de contingencia de la ciudad. Bloomberg no descartó una evacuación obligatoria de 270.000 residentes si empeora la situación. Por su parte, la gobernadora de Carolina del Norte, Bev Perdue, dijo en un comunicado: "Irene es una amenaza muy peligrosa para nuestro estado y debemos tomar las medidas de precaución para garantizar la seguridad de residentes y visitantes además de la infraestructura y propiedades de nuestra costa".
En ese estado, la Patrulla de Caminos calcula que más de 300.000 personas abandonarán los condados más afectados y se dirigirán a Raleigh, la capital, o el sur de Virginia. Se han habilitado ya refugios en las zonas del interior para los evacuados de los condados en peligro, como Dare. Las aerolíneas, entre ellas American Airlines y su filial American Eagle han cancelado centenares de vuelos hoy, la mayor parte en la zona del sur de Florida y las Bahamas, donde pasaba hoy el huracán. Mientras, la Marina estadounidense comenzó a trasladar sus buques de guerra del sureste de Virginia a zonas alejadas de la posible trayectoria del huracán, para protegerlos de las fuertes lluvias, vientos y oleajes.
La Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA) colabora en las evacuaciones, según explicó su director, Craig Fugate, que volvió a pedir a la población que se informe permanentemente de la evolución d