Los invitados al Palacio Frers de la Rural el lunes 6 de diciembre no podían disimular que efectivamente todos los corazones latieron un poco más fuerte después de ver las imágenes de esta Argentina, a veces desconocida para los propios argentinos, y que serán embajadoras ante el mundo dando pie a esta original campaña promocional en donde las experiencias vivenciales son la clave para mostrar algo más que las bellezas naturales.

¿Cuanto tiempo trabajaron para armar esta nueva campaña?
Venimos trabajando en esto hace un año y dos meses, exactamente.

¿Y cuánta gente participó en el diseño final?
Contamos con un enorme grupo de colaboradores. Hay que pensar que en la producción de los cortos audiovisuales de Alta Gama y en las fotos hubo más de 500 personas involucradas. Además de todo el trabajo propio del InProTur, en donde todo el personal del Instituto se vio involucrado de una manera u otra; pero solamente para generar esas imágenes en terreno hubo 500 personas.

¿Cómo surgió la idea de hacer una campaña tan diferente a todas las que se vieron hasta ahora de la Argentina?
Primero porque queremos ser diferentes, queremos ser vanguardia y estamos dispuestos a asumir el liderazgo por lo menos en la región en lo que respecta a la promoción turística. No queremos cielos celestes maravillosos, gente sonriendo sólo para la foto, el sol siempre brillando. Queremos mostrar un país real, un país que invite a vibrar con el dolor, con la alegría con toda su pasión, pero también con cansancio, como todo lo que tiene el mundo real; esa es la propuesta de Argentina y es lo que la hace diferente a toda la promoción que está haciendo la región y a lo que hace el resto del mundo. Es una apuesta. Nos podemos equivocar, pero la hicimos y estamos orgullosos de haberla hecho. Ahora tenemos que sostenerla y aspiramos a eso, a que ese turista que nos ve en cualquier parte del mundo empiece a latir desde esos cortometrajes, desde esas imágenes, empiece a latir pensando en la Argentina.

¿Por qué Late con Vos?
Porque hay un mundo donde el turista internacional se ha vuelto más experimentado. Ya no hay un viajero ingenuo que se cree todo, al contrario. El turista de este siglo es un tipo con mucha experiencia que viajó por el mundo, que conoce de aeropuertos, de shopping, que conoce de hoteles y esos son lugares que ya no venden más. Es importante tenerlos pero no hacen a la diferencia que en definitiva marcarán la elección del destino. La diferencia está en que puedan vivir experiencias únicas, auténticas, y en ese sentido la Argentina tiene una gran capacidad para mostrar y vender experiencias auténticas; eso es lo que tratamos de reflejar en estos cortos, en esas fotos y eso es lo que intentamos mostrar de nuestro país en la campaña.

Dialogamos con los  funcionarios de turismo de varias provincias y todos han hablado maravillas del InProTur. ¿Qué opinión te merecen esos comentarios positivos?
(Risas)…están todos comprados….  Hablando en serio creo que es el resultado de seguir el rumbo que imprimió el Ministro de Turismo Enrique Meyer a la gestión gracias a su especial carisma. Le hemos dado mucha importancia a la participación y al diálogo permanente con todo el mundo. No estamos inventando nada. Simplemente asumimos los riesgos de trazar un rumbo. Discutimos hasta al cansancio con todos antes de tomar una decisión, y mínimamente cuando llegamos a los consensos básicos para tirar para adelante y no perder tiempo. Eso es lo que estamos haciendo, y los resultados se empiezan a ver y me alegro de la satisfacción de las provincias.

El Ministro Meyer habló de cómo se consensuó la campaña entre el sector público y el privado ¿Cuán importante pasa a ser el sector privado en el desarrollo de esta campaña teniendo en cuenta que siempre que en nuestro país hubo un Estado que inició todo y ahora pretenden tener más participación?  
El gran avance de estos últimos años es la institucionalidad que logró el Turismo. Muchas veces me pregunto acerca de qué pasaría si el año que viene, por la razón que sea, o Meyer no está más, o Boto no está más, o cambia el signo político en la Nación, ¿qué pasará con todo este arduo trabajo de profesionalización que vivió el Turismo, al menos dentro del InProTur, con diseño de sistemas, intranet, habrá una memoria histórica, quién va a sostener este trabajo? Y me respondo que al Turismo lo tienen que sostener las instituciones, el sector privado, el sector público, las provincias y ahí es donde radica parte del éxito de esta gestión encabezada por Meyer: el generar las condiciones más allá de las personas para que esto pueda continuar. Imaginemos las reacciones en las provincias, en el sector privado si mañana viene uno y dice cambiamos todo, vamos para otro lado así automáticamente, livianamente y no con cambios constructivos. Ahí está la riqueza de este proceso.

El 2010 fue un año exitoso para toda la industria, inclusive para el turismo receptivo a pesar de las quejas. ¿Cómo vislumbras el 2011 y cuál es la expectativa que hay en el InProTur para el Turismo hacia el año próximo?
Yo creo que va a haber un gran crecimiento, creo en una consolidación y un crecimiento muy fuerte del sector aerocomercial. Vamos a empezar a ver las cosas teniendo presentes las consecuencias de este proceso  positivo que está viviendo Aerolíneas Argentinas. Creo que también vamos a ir aumentando la conectividad interna, porque lo estamos trabajando día a día con un montón de compañías aéreas que están desarrollándose en el país y las que seguramente tienen planes de llegar en breve y el proceso de inversión que nos da la sustentabilidad. Hoy la Argentina tiene la tasa de inversión turística más alta del Latinoamérica. Guste o no. Eso nos permite pensar en un horizonte de tres, cuatro años de continuo crecimiento económico.

¿Cómo se logró que lleguemos a ese punto con las inversiones extranjeras?
Generando las condiciones, atrayéndolas. Hay un plan de atracción y de captación  de inversiones turísticas. Desarrollamos un plan nacional y muchos planes provinciales. Organizamos viajes permanentemente para conquistar esas inversiones. Solamente en el 2010 se generaron 320 millones de dólares de inversión directa en el sector a partir de las rondas de presentación que hicimos en Doha, Londres y en China. Es esa la forma de trabajar. Ofrecer continuidad, ofrecer un marco de estabilidad y crecimiento y condiciones relativas que ayuden al inversor a decidirse por Argentina.

¿Cuáles son los lugares más requeridos para las inversiones?
Obviamente los destinos más tradicionales, pero después hay una apuesta muy interesante. Como veíamos que hay algunos lugares prácticamente desconocidos para el mercado internacional que tienen un potencial enorme los invitamos a conocerlos, y por ejemplo en el Bañado la Estrella (Formosa), hoy ya hay empresas globales de organización de safaris queriendo establecer inversiones importantes de servicios y eso es porque ven la evolución del mercado, ven la evolución de la continuidad de las oportunidades de inversión.
Ese sería uno de nuestros más importantes aportes al turismo nacional: abrir nuevos destinos al mundo.

¿Qué expectativas tenés a futuro?
Espero que el turismo siga creciendo y continúe este fuerte proceso de inversión que se vive en el sector. También me gustaría ver que la campaña sea un éxito y que nos vaya bien, por la Argentina, por nosotros y aspiro a que todos los argentinos estén orgullosos de esta campaña.