Después de tantos años como operador enfrentás un nuevo desafío, ¿de qué se trata?   
En realidad hay desafíos que uno busca y otros que resultan de no buscarlos. Fui convocado para representar a St. Petersburg/Clearwater para Argentina, Uruguay y Paraguay. En realidad, yo no lo busqué. Esto fue una sorpresa grata para mí, algo muy enriquecedor, porque después de 38 años de industria, un día sonó el teléfono de mi oficina y me dijeron si quería ser su representante y me dije ¿por qué no? Y aquí estoy. 

Son 38 años de dedicarte al turismo con gran presencia en St Petersburg/Clearwater, que si bien es un destino conocido, todavía hay que darlo a conocer más. ¿Por qué?
La función que me pidieron en el Bureau es básicamente trabajar en relaciones públicas y marketing. Obviamente, el destino tiene una pretensión acotada, por la cantidad de hoteles que tiene y como tal es un destino elitista, que pretende posicionarse en la región como una alternativa a los destinos que ofrece la Florida. Nuestra búsqueda es hacer acciones con aquellas empresas que estén posicionadas dentro del mercado de lujo, o de los productos de calidad. 

Ubiquemos al destino geográficamente, porque Miami sabemos que está en el Océano Atlántico, pero St. Petersburg/Clearwater está del otro lado…
Exactamente, está al oeste de Orlando, en la costa oeste de la Florida, sobre las aguas del golfo de México.
Se encuentra a cuatro horas en auto desde Miami, al noroeste, y una hora treinta desde Orlando hacia el oeste, por la autopista I-4. Es muy fácil de llegar. En realidad, decimos que St. Petersburg/Clearwater resultan las playas naturales y genuinas de Orlando, por cuanto es la playa más cercana que tiene. 

Y la calidad que tienen, ¿no?
De hecho, están entre las mejores del país. Fort de Soto fue elegida como una de las playas de mejor calidad de agua y de arena en los Estados Unidos y el mundo. Lideramos ese ranking que hace TripAdvisor en cuanto a la calidad de playas. 
¿Y como se carcateriza el d estino?
Es muy difícil definir que es St. Petersburg y qué es Cleawater. ¿porqué? porque es una mezcla de distinción, de playa de calidad, una mezcla que también involucra cultura, porque tenemos el único museo de Dalí fuera de Europa. Es el único lugar donde se le ofrece al viajero comida gourmet por la mitad de precio de cualquier lugar de los Estados Unidos. Tenemos el Chihuly, el museo de vidrio soplado más variado y grande del mundo. 
Son 55 kilómetros de playas, una distinta a la otra. Podemos optar por distintos pueblos, los hay con comunidades italianas o griegas donde se puede comer su comida o comprar esponjas recién sacadas del mar; o ver delfines, pero no delfines for export, sino verdaderos, auténticos, genuinos, desde cualquier bote o lancha que uno pueda rentar. 
 
¿Cómo es eso del Museo Dalí?
El Museo conserva 18 de las principales obras de Salvador Dalí de su etapa previa a la obra abstracta. Solamente la estructura vale la pena verla, porque impacta. Es un edificio ecléctico donde convergen muchos estilos, pero resulta impactante. 

¿Qué encuentra el viajero argentino?
El viajero argentino hoy busca calidad porque la calidad triunfa, más allá del precio. Lo que pasa que en este destino también tenemos precio, por lo cual es la ecuación perfecta. 
El argentino que viaja hoy está muy entusiasmado por encontrar destinos nuevos, sin que cuesten más. Sabemos que la puerta de entrada al destino puede ser Tampa, Orlando o Miami. Además hoy tenemos tarifas aéreas incomparables. No recuerdo haber contado en nuestro mercado con tarifas tan accesibles. 

Cuando hablamos de St. Petersburg/ Clearwater, ¿son dos ciudades distintas, o conforman un único centro urbano?
En realidad son dos ciudades unidas, por eso hablamos de St. Pete/Clearwater. La oficina de turismo que yo represento es el Visit St. Pete/Clearwater Convention and Visitors Bureau, mi función no sólo se limita al trade, al pasajero vacacional, sino que además a los meetings, los incentivos, congresos y convenciones que son muchas, en ambas ciudades. No hay un límite. Y eso es lo interesante, porque las personas que todavía no han tenido la suerte de conocer el destino imaginan dos ciudades unidas por un puente, o por algún hito, y no hay una unión, clara o visible. Uno cuando llega ve una gran ciudad, que sí tiene una connotación distinta una de la otra, porque Clearwater es una ciudad de gente más joven, relajada, informal, St. Petersburg es más formal, más elegante, es el área que alberga la mayor cantidad de restaurantes de calidad. 

¿Una está sobre la playa y la otra no?
Las dos están sobre la playa. De norte a sur, tenemos Clearwater, y terminamos al sur con St. Petersburg. Son 55 kilómetros línea recta de playa. Incluso es fácil para el que viaja en auto, que es la manera más lógica de conocer el destino. Tampa es la puerta de entrada, tras cruzar un puente, uno de los más largos de Estados Unidos, siguiendo al norte pasamos por St. Pete y llegamos a Clearwater. No se necesita un GPS. 

¿Qué tipo de hoteles se pueden encontrar?
Todos, y para todos los bolsillos y gustos. Tiene hoteles de lujo, de cuatro estrellas excelentes, de tres y muy buenos dos estrellas, algo que hoy necesita nuestra industria y que no encontramos en destinos importantes de La Florida. El gran problema que tiene hoy el viajero argentino que está acostumbrado a viajar con calidad de repente tiene un bolsillo más acotado. Esto no ocurre en nuestro destino, tenemos hotelería para todos. 
Por ejemplo, el último hotel de lujo en abrirse es el Sandpearl Resort, en Clearwater; le sigue el Opal Sands Resort, que es maravilloso, semicircular, con un servicio inigualable. 
Un gran hotel, e icónico, es el Don CeSar, de la cadena Loews, que en sus ochenta años ha alojado presidentes de Estados Unidos.
También tenemos al The Vinoy, otro hotel icónico, en la ciudad de St. Pete, y no podemos olvidar a los hoteles de cadena tradicional, como Hyatt, Sheraton, Hilton, Marriott, o el Zamora, que es un hotel de reciente apertura, tres estrellas, que deja a los cuatro con la boca abierta. El Zamora es un ejemplo de lo que es un hotel boutique, de 80 habitaciones, con un servicio excepcional. 
Todos tienen una connotación bien gringa, a diferencia de otras ciudades de la Florida, donde encontramos una cantidad enorme de inmigrantes latinos, acá no encontramos tanta gente que hable nuestro idioma. 

Es una Norteamérica más auténtica...
Exactamente. Es un Estados Unidos más real, pero la gente es tan amable, naif, tan genuinamente dispuesta al servicio, que nos olvidamos del tema del español. Hacen esfuerzos denodados para entendernos. 

¿Qué acciones vas hacer dentro de Argentina con los agentes de viajes y operadores, para seguir trabajando en pos del destino?
En principio estamos haciendo un trabajo enorme, viajando mucho, porque tengo a mi cargo también a Paraguay y Uruguay, países que están creciendo exponencialmente en cuanto a números de viajeros a Estados Unidos. Estamos haciendo acciones con los principales operadores de Uruguay, de Paraguay y también de Argentina. Pero mi trabajo no es sólo el de generar o promocionar el destino, sino que se me ha pedido trabajar en la necesidad de cada empresa. Si hablamos de tráfico corporativo, estamos trabajando con las principales agencias de viajes corporativas de Argentina, estamos trabajando con las principales líneas aéreas, para llegar a un acuerdo de cooperación y poder ofrecer paquetes o viajes a medida que de alguna manera tengan un valor agregado, y que ofrezcan un destino con una clara visión de la ventaja. 
Estamos haciendo muchos seminarios de capacitación, porque entendemos que para la industria es vital conocer cada vez más de los destinos. Hay una oferta inusitada de los destinos con la apertura de Medio  y Lejano Oriente, entonces, creemos que el agente de viajes y operador, como nunca, debe estar dispuesto a capacitarse. Ese es, a mi juicio, la diferencia que lo lleva a obtener ventas, y en esto creo que también el viaje a medida es lo que triunfa a futuro, así que estamos orientados en esa ruta.

¿Y qué recepción has tenido?
Tengo que agradecer la recepción de operadores mayoristas, colegas de tantos años, como así también de los agentes de viajes, que hacen un trabajo loable y me han abierto las puertas. Estamos llevando a cabo una serie de seminarios, tanto que me han pedido que pare un poco la mano porque los agobio. Así que les pido perdón a todos. Lo que pasa es que yo tengo que llegar a un número de viajeros argentinos y el año fiscal allá cierra el 30 de septiembre, así que “amigos a trabajar”. Pero estamos bien con los números, muy contentos.

Cuando dijiste que aceptaste este desafío, ¿te imaginabas que sería así?
Yo tenía la idea de que por ser operador mayorista iba a haber un conflicto de intereses. Y en el destino me plantearon de que no, porque en la industria local, hoy, hay muchos representantes que son también operadores mayoristas. Pero también me hablaron de algo que yo olvidé de mí, y que se ve que algo debo tener, que es la ética. Soy incapaz de robar un negocio de un colega. Entonces, como operador mayorista tengo muy claro lo que otro colega necesita, que es el apoyo del destino. Así que tengo un compromiso moral y ético a la enésima potencia con mi mercado.

¿Qué expectativa tenés?
Por el momento recibo felicitaciones, un gran aval de los directivos del Bureau que me alientan a seguir en este camino. Para mí es nuevo, estamos empezando con esto. Yo tengo cifradas esperanzas de poder llegar al número de viajeros argentinos que se necesitan para continuar. Argentina merece una mayor cantidad de viajeros hacia el destino. Creemos que podemos hacer un trabajo todavía mejor, falta mucho por hacer. 
Yo nunca hubiera tomado la representación de este destino si no confiara en él, y realmente confío porque es algo maravilloso.

¿Cuántos argentinos viajaban? 
Los números no son muy fieles porque hay muchos argentinos que viajan con el pasaporte de la comunidad europea para evitar la visa americana. Las líneas aéreas dan un número de viajeros con la que los hoteles no están de acuerdo, y los operadores receptivos americanos dan otro, que es un poco más fiable. Entendemos que hubo entre 500 y 600 mil viajeros argentinos en el 2015. Pero tenemos la sospecha de que fueron más por eso del pasaporte europeo. 

¿A cuántos te gustaría llegar?
Bueno, nosotros estamos, hoy, muy cerca de Brasil, que fue primero. Yo creo que si las cosas siguen así vamos a estar llegando a los 700, 800 mil pasajeros en el 2016. Pero en lo personal, yo tengo que cumplir con una meta, por supuesto, pero me importa más la calidad que la cantidad. El pasajero argentino que viaja al destino está orientado a satisfacer exigencias de otro nivel. Es un pasajero que privilegia la calidad por sobre todas las cosas, no podemos medir a este pasajero con el que viaja a un all inclusive, que es otro nicho de mercado. Mi trabajo apunta no solamente  a tener cantidad, sino calidad. El destino no quiere grupos de niños o adolescentes, y si así fuera, que cumplimenten una serie de requisitos. Nuestra promoción apunta a un destino exclusivo, de elite, y no porque el destino sea caro. Yo no quiero que esto se malentienda. 

¿Qué quiere el destino?
Queremos pasajeros que privilegien la calidad. Hay muchas áreas de naturaleza protegida, hay restricciones con la basura. El Condado de Pinellas es muy exigente con eso, es una pequeña Singapur.
St. Pete/Clearwater tiene una esencia distinta, por eso todo integrante de la industria que quiera conocerlo puede contactarse conmigo porque haremos lo posible para facilitárselo. Porque podemos hablar horas del destino pero si no lo ven va a ser difícil trasladarles de qué se trata.

¿Qué otras actividades encuentran?
El acuario, que funciona como un hospital de animales marinos es muy interesante para ser visitado. Estamos trabajando con el Garraham para que puedan viajar niños con prótesis, porque junto con la NASA el acuario creó la nueva prótesis de la cola del delfín Winter (el de la película) y cuya tecnología se aplica en humanos con éxitos maravillosos.   
Se pueden hacer paseos en barco por la Bahía con cenas a muy bajo precio, y con unas puestas de sol maravillosas. Podemos tomar un barco rápido que atrae a los delfines y donde uno tiene a la mano cantidades enormes para fotografiar. 
Hay muchos cayos, pequeñas islas maravillosas, como Fort de Soto, hay playas para gays, para familias. Lo que es llamativo es la seguridad, uno puede caminar horas en playas solitarias, dejar el bolso y al volver encontrar todo tal cual lo dejó. El mar es ideal para niños ya que podemos caminar cientos de metros con el agua a la cintura. 

¿Por qué elegir St. Petersburg/Clearwater?
Porque tenemos que ser felices, y la felicidad es para esta vida, que es la única que tenemos. Dejemos lo conocido, tenemos que pasar a la acción y poner un poco de creatividad en los itinerarios. El nuevo slogan de St. Pete/Clearwater dice “rearmá tu itinerario”, yo creo que con muy poco podemos darle el condimento que hoy el mercado necesita.