Estudió Administración de Empresas en la Universidad Nacional del Nordeste y en el 2007 se suma al proyecto político del gobernador electo de Chaco, Jorge Capitanich. Su plan de acción para desarrollar el Turismo como Política de Estado le merece ser nombrado Sub Secretario de Turismo desde Diciembre de 2007 a Diciembre de 2011.
Tras la aprobación de la Ley Nro.6637 en el 2010 se constituye formalmente el Instituto de Turismo del Chaco y el gobernador reelecto lo confirma en diciembre del 2011 en el cargo como su presidente, cargo que ostenta hasta hoy.

¿Con qué panorama te encontraste al llegar a la Subsecretaría de Turismo en el 2007?
De Subsecretaría tenía nada mas que el nombre, la sustancia no estaba. Tenía 500 mil pesos de presupuesto anual, 15 empleados, no tenía Dirección de Administración propia, y en todo el organismo había 7 computadoras, sólo cuatro con acceso a internet. Ni una central telefónica teníamos.
Con el proyecto político de “Chaco merece más”, del cual formo parte, siempre pensé que era posible un Chaco Turístico, e inmediatamente nos pusimos a trabajar en esa visión. Para que haya desarrollo turístico tiene que haber dos elementos claves: decisión política y visión estratégica.    
Esa decisión política y visión estratégica en el Chaco es compartida por el Ministerio de Turismo de la Nación, porque por las características de nuestra República, por más que uno quiera solo, si la Nación no acompaña esa decisión política es más difícil de concretar.
El trabajo empezó a dar frutos ya desde el 2007 con muy buenos resultados. No olvidemos que la OMT plantea un crecimiento anual acumulado del 5% de acá al 2020, entonces ese contexto favorable nacional e internacional ha facilitado y permitido que la decisión de la provincia de desarrollar el turismo se sinergie con ese contexto.

¿Cómo fue el camino hacia el Instituto de Turismo?
Cuando ingresé a la Subsecretaria teníamos tres aspectos para trabajar: uno era el fortalecimiento del organismo, que era necesario, porque más allá de las personas que lo conformaban muchas de las cuales tenían una gran experiencia, había que pensar en el para qué del organismo, porque no basta con tener un cartel que diga que es Ministerio, sino tener una Dirección de Calidad, una de Desarrollo, de Estadísticas, de Fiscalización, de Servicios Directos, como tenemos hoy; entonces encaramos el fortalecimiento institucional, el Plan Estratégico y el tema de eventos o turismo de reuniones.
Empezamos en el 2007 con ese plan en mente y a la distancia puedo decir, con el diario del lunes, que fueron dos lados de una misma moneda. Porque uno puede tener un excelente Plan Estratégico pero después hay que aplicarlo. El papel aguanta todo. Lo importante es darle sustento. Hoy puedo decir que esas decisiones fueron las correctas.
Los principios sobre los cuales basamos el proyecto político son los que se planteó el plan “Chaco merece más” que son: austeridad, honestidad, transparencia y eficiencia.  
Cuando entré a la Subsecretaría el organigrama contemplaba un Subsecretario, un Director, un Asesor Técnico, una Secretaría Ejecutiva y un departamento de Promoción. Eso era todo.

¿Porqué, formando parte de un región con provincias con un gran desarrollo del turismo como Corrientes o Misiones, Chaco estaba tan demorado?
Por una decisión política y visión estratégica. Esa es la respuesta. Comparando la estructura de la cartera turística de Corrientes en el mismo momento (2008) ellos tenían 5 Directores, 10 subdirectores, y mucho más, eso habla bien a las claras de la decisión política de uno y otro gobierno.
Sin embargo, y con esa mínima estructura, yo rescato el valor de la gente que integraba mi Subsecretaría.
Continuando con la comparación con la vecina provincia de Corrientes, nosotros teníamos un presupuesto de 1 millón de pesos, del cual el 50% era para pago de personal, por eso dije antes que tenía sólo 500 mil pesos para destinar a Políticas de Calidad y Desarrollo de Promoción, contra 4.500.000 de pesos de ellos, es decir tenían cuatro veces y medio nuestro presupuesto. De ahí partí.


Cómo fue revertir esa situación?
El desarrollo del Plan Estratégico lo encaramos con el apoyo del Ministerio de Turismo de la Nación, que nos acompañó permanentemente en cada área, y quiero rescatar eso porque es fundamental. Conseguimos el financiamiento en el 2008, lo formulamos en el 2009 y se presentó en ese mismo año. Y creo que es el único Plan en todo el país que está aprobado por una ley provincial, la Ley 6637, en la que se desarrolla el Plan Estratégico, el proyecto, la visión, los Polos turísticos, la definición de estrategia, es decir la cuestión técnica y política y una herramienta de control de políticas de Estado fenomenal. Porque ¿qué es ser Política de Estado? es una política que sobrepasa las gestiones, y si ese plan lo plasmás en una ley, estás pensando en un control institucional por parte de la Legislatura para que se sostenga en el tiempo. Creo que ninguna otra provincia lo tiene. Puede ser que haya algunas leyes que digan que el organismo de aplicación de turismo deberá promover un Plan de Desarrollo Turístico, pero estoy seguro que el Chaco es la única provincia que tiene el Plan hecho Ley. Y en una ley que fue aprobada por unanimidad.
Al año siguiente, es decir en el 2011 para el 2012, se crea la jurisdicción del Instituto y ahí es donde se empieza a poner en funcionamiento real el Instituto de Turismo de la provincia del Chaco, cuando Capitanich me ratifica y me da la confianza de asumir la presidencia del Instituto a partir del 11 de diciembre del 2011.
A esta altura teníamos un presupuesto de 22 millones de pesos, que corresponde al 0,25% del presupuesto provincial y eso ya te da otro volumen, pero de todas maneras ese proceso de emancipación lleva un tiempo, y todo el que ha estado en la función pública sabe que tener una Dirección de Administración propia es muy importante, y nosotros contamos con esa Dirección recién este año. Que quede claro que desde el mismo momento en que se crea el Instituto yo, como su presidente, no tenía que consultarle más que al gobernador, eso te da un juego diferente. Pero la implementación administrativa que en el Estado es mucha, los papeles, la formalidad, el tener una dirección administrativa prestada, era una dificultad más. La particularidad del turismo es muy específica en cuanto a su léxico por ejemplo, y yo cuento siempre que una vez me rechazaron una factura de poco monto porque en la misma se decía “dos escritorios para el workshop X”, diciéndome que como son bienes registrables no los puedo comprar así, porque creían que se trataba de un bien mueble, no entendían que era sólo la contratación de un espacio. Por eso tu dirección de administración tiene que entender de qué se trata el tema. Ahora todo camina más rápido.

¿Qué logros han tenido en estos seis años?
Muchísimos. Comenzando por la Ley, el Instituto de Turismo es otro. El Plan Estratégico es un resultado. Nosotros hemos implementado muchísimos Programas de Calidad, y son muchos los prestadores que ahora ya tienen certificados de Calidad; aumentamos la tasa de ocupación que es realmente muy buena con un promedio del 70%; en el 2013 tuvimos 423 reuniones; la infraestructura hotelera pasó de 3600 plazas en el 2007 a 5600 plazas en el 2014, un 54% más. Nosotros vamos a terminar con 7000 plazas en el 2015, ¿qué significa eso? que en esta gestión de gobierno se hizo lo mismo que en toda la historia del Chaco. Ahí te das cuenta de la dimensión del cambio. No todo se explica por el turismo de ocio, porque turismo involucra también al turismo de reuniones.
En la temporada alta del 2013 la motivación del viaje, según se desprende de la Encuesta de Demanda Turística elaborada por nosotros, fue del 17% por turismo de ocio o placer y el 21% por turismo de reuniones, que también es política del Plan Chaco Explora, porque allí queda muy en claro que el proyecto involucraba primero la refuncionalización del Domo del Centenario para que sea un pequeño centro de convenciones (2010), y luego la construcción del Centro de Convenciones Gala (2013). Las otras motivaciones son: 34% trabajo, 22% por visita de amigos, el 3% por salud y 3% otros. Si se suma el 17, más el 21% por turismo de ocio y reuniones y lo comparás con trabajo que da 34%, nosotros podemos decir con todo orgullo que el 38% de las personas que visitaron la provincia en temporada alta lo hicieron, de alguna manera, influenciados por la política turística de la provincia. Y todo está publicado en el sitio web del organismo, www.chaco.travel, donde se puede leer el informe de más de 100 páginas.

¿Qué objetivos se fija el Plan Chaco Explora?
Cuantitativamente tenía un objetivo de captación de 365 mil pernoctes, que superamos ampliamente, ya que el año pasado tuvimos casi 400 mil pernoctes, cuando recalculamos este número para el 2015 pusimos una meta de 550 mil pernoctes. Ese es el resultado cuantitativo, pero yo voy a parafrasear a Lawrence Pratt que es Director del Centro Latinoamericano para la Competitividad y el Desarrollo Sostenible de Costa Rica, con estas dos cuestiones: una, el turista no vota, y segundo, no siempre más turistas es mejor política de turismo. Y la estrategia del Plan es eso, darle un razonamiento posible desde el punto de vista de lo técnico, porque Chaco puede ser, y de hecho es, un destino turístico, no tradicional pero lo es. Eso nos dio el Plan Chaco Explora, una estrategia, una visualización de que el turismo también es una herramienta de desarrollo económico en el Chaco, y lo puso a la luz, con fundamentos técnicos.
¿Qué dio el Plan? Una estrategia de nicho. En esa estrategia nacional el Chaco toma una pequeña parte y va a trabajar sobre ella. El Impenetrable, “un océano verde y misterioso donde la naturaleza se encuentra con las culturas originarias”; o la pesca deportiva; o el turismo científico. Chaco Explora puso la luz sobre 12 experiencias turísticas posibles, algunas para vender más regionalmente, otras para vender más nacionalmente y otras para vender más internacionalmente. La promoción debe hacerse de acuerdo al mercado que se apunta sabiendo que experiencia levanta más y cual menos.
Sin ese Plan hubiera sido muy difícil sostener una estrategia en el tiempo.

Acaba de finalizar la Bienal de Esculturas del Chaco, ¿cómo fue?
Por primera vez en 26 años tuvimos una oferta regular estructurada con un paquete turístico. Nosotros junto con Fabriciano Gómez, un personaje muy importante, presidente de la Fundación Urunday y un gran escultor que creó hace 26 años este evento, que creció por la decisión política de los gobiernos provinciales, y gracias al apoyo de los privados, que fueron generosos, logramos que los hoteles, los restaurantes, las excursiones, se pongan a un precio bien económico y vinimos a golpearle la puerta al MINTUR y a Aerolíneas Argentinas para que lo incorporen al programa Aerolíneas Vacaciones. Este ejemplo sintetiza muy bien este esquema de coincidencia de la visión estratégica y la decisión política nacional y provincial.    

¿Qué tareas conjuntas realizan con Corrientes?
Estamos trabajando muy bien con la Municipalidad de Corrientes y con el Ministerio de Turismo, porque Resistencia y Corrientes están muy cerca y hay que trabajarlo en ese esquema con estrategias de promoción y folletos comunes, además de analizar la oferta de servicios directos que se puedan hacer en conjunto, es un trabajo fructífero y muy bueno.  

¿Qué aspiran a futuro?
El organismo está apuntando a lograr el Premio Nacional a la Calidad Turística. No sé si lo vamos a ganar alguna vez, pero igualmente quiero agradecer a todo  mi equipo de trabajo, al de hoy y al de antes, y no sólo al que trabaja en Turismo sino al que está en Cultura, Ambiente, Planificación. Yo soy la cara visible, pero es un equipo de trabajo y esa visión de organismo sólido la sintetizamos en el premio nacional a la calidad, una línea que estamos trabajando junto al MINTUR para ver si lo ganamos en alguna oportunidad, porque en definitiva los funcionarios nos vamos a ir pero probablemente dejemos un organismo muy diferente al que había allá por