¿Podrías presentarte en sociedad?
Nací en Bogotá y estoy con Superclubs hace tres años. Entré como director de ventas y marketing, en Brasil, para América del Sur. De ahí, hace un año, año y medio atrás, me promovieron para vicepresidente de la compañía de operaciones y desde hace unos 13 meses también soy el director general de Breezes Buzios Resorts & Spa que es nuestro nuevo producto en Brasil. Si consideramos que el 2010 fue realmente el primer año de inicio de tareas, recién estamos entrando al segundo año de operaciones.
Antes estuve en Meliá, donde fui director de ventas y marketing para América del Sur, esa fue mi segunda experiencia con Meliá, porque ya había estado en Colombia y en España. Y antes trabajé con Caesar Park también como director de ventas para América del Sur. Siempre ligado a la hotelería, no sé hacer otra cosa.
Vivo dos semanas en Breezes y una semana en San Pablo.

Como producto nuevo en Buzios ¿qué reacción tuvo el mercado argentino?
El mercado felizmente ha reaccionado bien. Buzios es un destino casi natural para los argentinos. Hemos hecho un gran trabajo aquí junto con World Network Reps., de promoción y de ventas, durante todo este año, y conseguimos incrementar las ventas desde enero de 2011 a enero del 2012, en más del 300 por ciento. Y ahora febrero y marzo vienen bien porque el chárter de Argentina hacia Cabo Frío se extiende hasta el 6 de abril. Hoy estábamos hablando con nuestros operadores y nos decían que el vuelo más rentable para ellos es justamente el de Cabo Frío, es en donde ellos se arriesgan más porque tienen casi garantizada la venta de los lugares.
Una gran ventaja para quienes llegan en ese vuelo es precisamente la ubicación ya que nosotros somos el primer hotel saliendo de Cabo Frío yendo hacia Buzios, apenas media hora desde el aeropuerto, estamos en la primera playa de Buzios.

¿Qué fue lo que llevó a Superclubs a elegir a Buzios para hacer este emprendimiento?

La compañía está empeñada en crecer con la marca Breezes en Brasil. Ya teníamos la experiencia de Sauipe allí y una compañía constructora llamada Wrobel nos convocó para que operáramos el hotel que ellos tenían en mente construir, hace de esto siete, ocho años. Ellos querían construir ese emprendimiento solamente para un hotel Breezes, por lo cual llegamos a un acuerdo, y acá estamos. Para nosotros claro, Buzios es un destino interesante, es un destino muy fácil para vender, pero también tiene la particularidad de ser muy estacional, donde hay un verano muy marcado en el que se trabaja muy bien, y una época de baja ocupación de nueve meses, que va de marzo a noviembre.

¿Es tanto así?
Sí, sí. La ventaja que tenemos a comparación con otros productos en el destino, y la gran diferencia, es que somos el único hotel resort de concepto “All Inclusive” en Buzios, nadie más lo tiene. Lo que yo les digo a los dueños de las Posadas es que no tienen que tener miedo de la llegada de un hotel de 370 habitaciones, estilo resort, porque es diferente a todo lo que hay en Buzios. Y de alguna forma al ser un concepto tan diferente para el destino nos cuesta imponernos. Desde nuestra apertura estamos enseñándoles a los agentes de viajes, e informándole al público, que el producto está allá para cambiar un poco las costumbres del argentino en Buzios porque a la gente le gusta quedarse en el centro, ir a pasear a la Rua das Pedras, y creen que no pueden hacerlo si están en un all inclusive. Cuando no hay ningún impedimento para hacerlo.

En Río tampoco hay ningún hotel de esta magnitud.

No, en la región somos el único hotel de este tamaño y de ese concepto hasta el día de hoy. Entonces se da el fenómeno de que se bien al pasajero argentino le gusta ese concepto para viajes al Caribe, está muy acostumbrado a las Posadas en Buzios, y tenemos que ir creando la demanda. Porque el cliente que siempre va a una posada no va a ir al Breezes Buzios Resort. El que va al Breezes es porque le gusta otro concepto de hotelería, es una propuesta para un público diferente. Lo que ha hecho Breezes en este año y medio en general fue crear la demanda para ese tipo de viajeros en el destino.

¿Y qué se hace en el Breezes en la baja temporada?

Bueno, nosotros contamos con un producto diferenciado por el Centro de Convenciones. Es un hotel que se adapta muy bien a grupos, viajes de incentivos, y para ellos tenemos un completo Centro de Convenciones con tecnología de última generación.

¿En Buzios no hay otro centro de convenciones?

Sí, al norte hay un centro de convenciones más grande que el nuestro, de 1200 personas, pero tiene apenas 160 habitaciones, nosotros estamos proporcionalmente adecuados para la cantidad de habitaciones que tenemos. Entonces identificamos ese segmento del negocio para atraer grupos para esos meses de baja temporada, y hemos tenido mucho éxito. El hotel tiene excelentes resultados con grupos de incentivo, corporativos, etc. Ya hemos tenido grupos importantes, muy grandes de argentinos. Nuestro trabajo está enfocado a que a desde marzo hasta noviembre nuestros clientes son los grupos.

Dejando de lado el tráfico brasileño que naturalmente va a Buzios, ¿cuáles son los principales destinos emisores de pasajeros internacionales?
En la actualidad el 60 por ciento de nuestro negocio es brasilero, 35 por ciento es de sudamericanos, especialmente de Chile y Argentina, y otro 5 por ciento se distribuye entre Europa y Norteamérica. Y ese 35 por ciento, si lo convertimos en un 100, 70 por ciento es de Chile y 30 por ciento es de Argentina.

¿Qué es lo que más sorprende de Breezes?

Básicamente la variedad gastronómica, son 5 restaurantes y otra gran diferencia es que en la marca Breezes el entretenimiento es muy distintivo. Tenemos programas de entretenimiento para adultos, para jóvenes y niños, desde las 8 de la mañana hasta la medianoche. Y es súper divertido, muy variado, ya que hay muchos deportes acuáticos, canchas de tenis iluminadas, tenemos un salón de juegos inclusive con cancha de bowling. Entonces el entretenimiento y la variedad gastronómica no lo consiguen en otra parte en Buzios bajo el mismo techo.

Y la piscina gigante…
La piscina es inmensa, en realidad son tres piscinas. La más grande recorre prácticamente todo el hotel, pasa por el medio de las villas y casi se puede salir al mar directamente. Después está la piscina de los bungalows, que además en la terraza tienen un jacuzzi privado, más los bungalows frente al mar, que es el área de Suites que tienen una piscina privada sólo para ellos.
Tenemos el spa también, y a la gente le encanta. Es un importante diferencial por eso nuestro nombre es “Resort & Spa”. Ofrece varios tratamientos a cargo de una empresa muy profesional que brinda un excelente servicio, Blue Mahoe Spa.
El hotel sorprende desde la llegada por la imponencia de la edificación. Somos de los pocos hoteles en Buzios que estamos en la playa directamente, no hay que salir, no hay que cruzar la calle. Vas directo del hotel, a la playa.
Para la gente que le gusta ir a la Rua Das Pedras, porque es muy conocida la noche de Buzios, ofrecemos un transporte desde las diez de la mañana hasta las dos de la mañana de ida y vuelta. Claro, eso hay que tenerlo porque la gente que va a Buzios quiere salir, caminar y descubrir su encanto natural.

¿Porqué crees que el chileno supera al mercado argentino?

El producto Breezes ha penetrado mucho más rápido en el mercado chileno que en el argentino. Creo que porque al argentino, que prácticamente hizo a Buzios, le ha quedado la idea de que el destino está compuesto exclusivamente por posadas adonde quiere que le sirvan el desayuno porque él quiere almorzar y comer en la Rua Das Pedras.

¿Puedo contradecirte, no será que no conoce definitivamente la propuesta de Breezes?

Porque Buzios y Breezes combinan varias cosas que le gustan al argentino, el lugar, la playa, y el todo incluído. Sobre todo para grupos familiares.
Hubo que introducir un concepto nuevo para Buzios, aunque la marca Breezes es muy conocida para el argentino. Hay muchos operadores que lo venden, pero que los asusta publicarlo junto a sus otras ofertas del destino porque a simple vista hay una gran diferencia de tarifa entre el Breezes Buzios y una posada.

¿Qué incluye el Super-Inclusive de Breezes?
No solamente incluye el uso de todas las instalaciones, tienes comida las 24 horas. No para, siempre hay diferentes restaurantes abiertos, pero en 24 horas siempre hay un lugar en el resort donde puedes comer.
Y también tenemos dentro del “super inclusive” vinos, principalmente argentinos, de buena calidad. Si el cliente desea tomar un vino preferencial en algunos restaurantes a la carta también tenemos una carta en paralelo y él escoge su vino y lo paga, si quiere. Él tiene vino, argentino y de buena calidad, ahora si quiere un vino francés o de California y quiere pagar 300 reales o 400 reales, pues ahí lo tiene también. Tiene cinco bares con bebidas Premium, como Chivas Regal o Absolut Vodka. Tienes Cointreau. Son todas bebidas Premium. O cachazas para hacer caipirinha. A diferencia de otros resorts nosotros ofrecemos bebidas de primeras marcas. Sólo se pagan los tratamientos y masajes del Spa.

Y ahora, haciendo un paralelismo ¿cuánto cuesta comer afuera del resort en un lugar de la misma calidad?
Si encuentras un bar de playa, cuesta 16 reales, 18 reales o un plato en un buen restaurante cuesta 70 reales.

O sea, si te la pasas comiendo todo el día te conviene ir al resort…

¡Pero claro! Eso es lo que le hemos querido vender a los operadores aquí y no lo entienden todavía, o dicen que su  público no lo entiende. Si tú le pones un precio a todo lo que comen y beben las personas en el hotel (comida y bebida de excelente calidad), el precio lógicamente es mucho más barato que una posada en el centro, somos mucho más baratos.
 
¿Cuál es la mejor temporada para visitar el Breezes?

Para mí la mejor temporada es la que viene ahora, marzo, abril, porque ya no tienes el tumulto, y todavía sigue el clima agradable.

¿Y existe la posibilidad que en algún momento se hagan chárters exclusivo para Breezes cómo tienen otros “all inclusive”?

Y,  hay un interés de hacerlos para baja temporada. Nosotros como empresa vamos a apoyar esa iniciativa.

Al momento de la apertura hubo algunos inconvenientes, ¿qué pasó y cómo se solucionó?
El problema estuvo en la instalación de los aires acondicionados, que son individuales, entonces la empresa que realizó las instalaciones tuvo que hacer todo el trabajo de nuevo. Y ya no puedes traer a un equipo de 200 personas para hacerlo en un día porque están las habitaciones ocupadas, entonces tienes que empezar a hacer un cronograma para ir haciendo cierres parciales para hacerles mantenimiento, pintura, limpieza. Fue un largo proceso que nos llevó en total 8 meses.